La vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, ha asegurado este miércoles que la operadora pública saudí STC ha trasladado al Gobierno que su entrada en el capital de Telefónica (con la compra del 9,9% de las acciones) constituye una operación "amistosa" que "tiene que ser interpretada en clave de apoyo al equipo directivo y la estratégica de Telefónica y apoyo a España".

Calviño ha dejado claro que Telefónica es una empresa "estratégica" y que el Gobierno activará todos los mecanismos necesarios para defender los intereses de España. Al mismo tiempo, la vicepresidenta primera ha subrayado que las inversiones extranjeras "están siendo fundamentales para impulsar el crecimiento económico, la creación de empleo de calidad en nuestro país y también la modernización tecnológica".

"La empresa se ha puesto en contacto con el Gobierno ayer y ha transmitido el carácter amistoso de la operación. Ha expresado su intención de no proceder a la toma de control de la empresa y considera que esta operación tiene que ser interpretada en clave de apoyo al equipo directivo y la estratégica de Telefónica y apoyo a España", ha revelado la vicepresidenta en declaraciones a la prensa durante una visita a Bruselas.

[El Gobierno, sorprendido por la entrada de la operadora pública saudí Stc como primer accionista de Telefónica]

"Desde que llegamos al Gobierno, hemos reforzado todos los mecanismos de control de inversiones extranjeras, todos los mecanismos para poder proteger nuestros sectores y nuestros intereses estratégicos. Y al mismo tiempo hemos impulsado el papel de España como polo de inversión de inversiones extranjeras, que son fundamentales para poder seguir teniendo un crecimiento económico fuerte y creación de empleo de calidad y también una modernización tecnológica", sostiene Calviño.

"Estamos analizando todos los factores para determinar si se aplican o no estos mecanismos. Factores como la participación en el capital, el sector de actividad, la relación con la seguridad y la defensa del país, el ejercicio de los derechos de voto, la participación en el consejo de administración de Telefónica o en otros órganos de decisión", ha enumerado.

"Telefónica en todo caso, y claramente, es una empresa estratégica para España. Y desde el Gobierno lo que haremos es aplicar todos los mecanismos necesarios para garantizar, como hemos venido haciendo desde 2018, la defensa y la protección de nuestros intereses estratégicos", ha subrayado Calviño. "Tenemos que lanzar un mensaje de confianza y un mensaje de tranqulidad", insiste.

Calviño se distancia así de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, que desde el minuto uno se ha pronunciado contra la entrada del operador público saudí. "Preservar nuestra autonomía estratégica es esencial. España debe asegurar la toma de decisiones en empresas como Telefónica, guardianas de datos sensibles. Es necesaria una mejor regulación y una protección para evitar OPAs. Debemos proteger nuestro futuro digital", ha dicho la líder de Sumar.