García es una de las grandes bazas de la apuesta de Zegona para reflotar el negocio de Vodafone en España tras cerrar este martes la compra de la operadora por 5.000 millones de euros. No lo tendrá fácil, ya que el mercado español sigue siendo uno de los más competitivos de Europa, lo que ha llevado al sector a acumular años de destrucción de valor. 

A su favor está su amplio conocimiento del mercado español y su exitoso historial a la hora de hacer atractivos negocios que no atravesaban por su mejor momento. Pero también está su experiencia como directivo en compañías internacionales (ha sido CEO en 16 países) y su capacidad de negociación en el ámbito empresarial e inversor. 

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De hecho, esta no es la primera vez que Zegona confía en García para dirigir alguna de sus inversiones. En junio de 2019 consiguió ponerlo al frente de Euskaltel tras convertirse en el primer accionista de la compañía vasca. Un puesto en el que permaneció hasta que la empresa fue comprada en 2021 por el Grupo MásMóvil.

Esta era la segunda vez que el directivo lograba que la operadora que dirigía se embarcara en un gran proyecto fusión en España. Antes, en 2015, Orange cerró la compra de Jazztel, compañía a la que García llegó en 2006 y acabó convirtiéndola en el cuarto operador de nuestro país. Orange pagó 3.355 millones de euros por Jazztel.

Carrera internacional

Aunque nacido en Madrid, José Miguel García vivió muchos años en Australia por motivos familiares. Allí se formó como ingeniero en electricidad y electrónica y cursó un posgrado en Comunicaciones Digitales por la Universidad Monasch C.I.T. de Melbourne, entre otros estudios.

Empezó su carrera como consultor de telecomunicaciones y tecnología en Lincoln Scott International (Australia) y posteriormente fundó y ocupo el puesto de consejero delegado de Case Technology España/Portugal, hasta que le vendió esta compañía a Cable & Wireless. 

José Miguel García, ex consejero delegado de Euskaltel.

En esta última empresa desarrolló gran parte de su carrera profesional, donde ocupó cargos como el de consejero delegado en España y Portugal, vicepresidente ejecutivo en Europa, consejero delegado en Panamá y director general en Reino Unido e Irlanda y llevó a cabo numerosas operaciones.

Por ejemplo, en Reino Unido e Irlanda formó parte del equipo de la adquisición de Energis y llevó a cabo iniciativas de reducción de costes, mientras que durante su etapa como vicepresente ejecutivo en Europa integró 24 compañías diferentes que habían sido adquiridas por C&W y desarrolló un canal europeo de marketing y ventas a empresas.

Jazztel

En mayo de 2006, Leopoldo Fernández Pujals decidió confiar en José Miguel García y su equipo la gestión del día a día de Jazztel para lograr impulsar el negocio de la compañía y consolidar a la operadora como un actor relevante del mercado español de las telecomunicaciones. 

Nueve años después, cuando el grupo francés Orange compró la compañía por 3.355 millones de euros, Jazztel era ya el cuarto operador del mercado español y la cotización de la acción era casi el doble en comparación con la que tenía cuando entró García como CEO.

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En esos años, consiguió hitos financieros como una reducción de la deuda con una quita a los bonistas del 50% o un acuerdo histórico con Telefónica para desplegar redes de cable en España con financiación del Banco Europeo de Inversiones (BEI). A nivel comercial, consiguió que Jazztel fuera percibido como un operador asequible sin ser realmente el que tenía las tarifas más baratas.

Tras la venta de Jazztel a Orange fue miembro del consejo y vicepresidente de Millicom Group y consultor estratégico de Orange Group durante los años 2016 y 2017. En 2018 participó de manera exitosa en el proceso de adquisición de SQRRL y Briefcam por parte de Amazon y Canon.

Y luego llegó Euskaltel, donde comenzó la alianza entre Zegona y José Miguel García que ahora se repetirá en Vodafone. La compra y posterior venta de Telecable y Euskaltel fueron calificadas como un éxito por el fondo británico y parte del mérito está precisamente en la gestión que realizó García.

Los que han compartido compañía con él dicen que es muy exigente pero también una persona muy trabajadora y brillante. Además, coinciden en que su filosofía es muy similar con la que Zegona quiere rentabilizar su nueva inversión en Vodafone: aprovechar todo el potencial de la empresa para impulsar su crecimiento.