La fusión de Orange-MásMóvil empuja a una consolidación en las infraestructuras: hay tres redes y cuatro torreras
El sector y los expertos ven "ineficiente" este escenario, pero descartan que haya movimientos corporativos entre empresas de torres a corto plazo.
29 abril, 2024 02:37La fusión de los negocios de Orange y MásMóvil ha dejado un escenario un tanto extraño en el mercado de las infraestructuras de telefonía móvil en España. Y es que, con la reciente creación de Masorange, en nuestro país habrá a partir de hora tres grandes redes móviles, pero cuatro empresas de torres. O lo que es lo mismo, tres clientes y cuatro proveedores.
Un esquema de mercado que tanto las propias torres como los analistas consideran que es a todas luces ineficaz. La solución pasa, por tanto, por una inevitable consolidación de las empresas de infraestructuras. Sin embargo, por el momento, no parece que se vaya a producir ningún movimiento a corto plazo.
"No hay negocio para todos", admiten en privado fuentes de las empresas de torres de telecomunicaciones a EL ESPAÑOL-Invertia, que consideran que la red que desplegará Digi tras hacerse con los remedies de la fusión entre Orange y MásMóvil no será suficiente para cubrir el hueco que dejará la unión de las redes de las dos anteriores operadoras.
Una opinión similar es la que defendió Marco Patuano, consejero delegado de Cellnex, tanto en un encuentro con la prensa antes de la junta general de accionistas de 2024 como en la conferencia con analistas de los resultados del primer trimestre. Para el directivo, un modelo con tres operadores y cuatro torreras no es eficiente.
En esta misma línea se expresa Carlos Winzer, vicepresidente de Moody’s, en declaraciones a este periódico. Y es que parte del crecimiento de las compañías de torres viene de buscar nuevos inquilinos para sus infraestructuras, algo que puede ser complicado si compiten cuatro proveedores por sólo tres grandes clientes.
Consolidación
¿Cuál sería la solución más lógica a este problema? La respuesta parece evidente: una consolidación del sector en España. No obstante, Winzer señala que ahora mismo no parece que haya "ninguna evidencia" que apunte a una reducción de las empresas de torres en España, aunque cree que sí podría darse algún movimiento en el futuro.
"Sí, creo que sería óptimo reducir el número de compañías, pero no creo que en este momento haya ninguna indicación de que vaya a ver una operación de consolidación de torres en España", admite.
Por su parte, Patuano señaló que en un mercado que se consolida por el lado de los operadores, es lógico que por el lado de las torreras se vaya en la misma línea. "La dirección tiene que ser la de homogeneización de las infraestructuras pasivas con las infraestructuras activas. ¿Cómo se hace? ¿Cuándo se hace? Esa es una muy buena pregunta", ha añadido.
A este respecto, añadió que todo este proceso está en una fase "muy preliminar" y la discusión es todavía "sumamente teórica". El foco ahora mismo sigue estando en mirar qué es lo que hacen las operadoras y, por ello, todavía no hay conversaciones en marcha con nadie.
Otra ventaja al respecto es que el negocio de las infraestructuras de telecomunicaciones nunca es a unos pocos meses, sino que las torreras trabajan para dar servicio a 20 o 30 años. Por ello, añadió que no va a cambiar mucho el resultado final si esa consolidación se produce este año o en 2025.
La duda es quiénes son los actores que podrían decidir dar el paso hacía esa consolidación. Por un lado, Cellnex y American Tower son dos empresas industriales e independientes con una estrategia a largo plazo, mientras que Totem con Masorange y Vantage Towers con Vodafone tiene asegurados a sus clientes ancla.
Patuano ha destacado que las cuatro son operadoras industriales "profesionales" y ninguno consiste en una pequeña cartera de activos en manos de un fondo que tarde o temprano querrá vender. Lo que sí tiene claro es que Cellnex desempeñará un papel importante tras el proceso de consolidación que tenga lugar en España, dejando así la puerta abierta a su posible implicación en el mismo.
Otro factor que, según Winzer, ha frenado en seco las operaciones de compra o fusión de empresas de torres ha sido la subida de los tipos de interés. Y es que los niveles actuales han provocado que las valoraciones de estos activos bajen e impidan venderlos a múltiplos, como el que se registró en la venta de las torres de Telefónica a American Tower a principios de 2021, de 30 veces el Ebitda.
El papel de Digi
La otra incógnita es el papel que desempeñará Digi en todo este proceso. La compañía podrá construir su propia red de telefonía móvil en España gracias a las condiciones que Orange y MásMóvil acordaron con la Comisión Europea (CE) para recibir luz verde a su fusión. En concreto, la operadora del grupo rumano tendrá en unos meses 60 MHz tras comprárselos a la joint venture por 120 millones de euros.
Aunque con esta cantidad de espectro Digi tendrá que depender de las redes de otros operadores para seguir ofreciendo sus servicios (por ejemplo, no tiene frecuencias en las bandas bajas que dan cobertura a interiores), sí deberá desplegar su propia red si no quiere perder esos 60 MHz.
Sin embargo, todavía se desconoce cuál va a ser la estrategia de despliegue de Digi. La compañía puede optar por construir ella misma su propia red o encargársela a una empresa de torres, en lo que se conoce como el modelo Build to suit (BTS). También está la opción de que toda o parte de su red móvil se apoye en infraestructuras ya existentes.
Para Winzer, "lo más sensato y más eficiente" sería que Digi usará esas infraestructuras ya existentes o el modelo BTS, dado que construir sus propias torres requeriría una mayor inversión y además el despliegue de su red propia sería más lento.
De una opinión similar es Patuano, que considera que no sería racional imaginarse un despliegue de una red nacional de Digi. "No me parecería racional y lo que ha demostrado Digi consistentemente es que es un actor muy atento y muy racional", agregó el CEO de Cellnex.