El Gobierno da 222 millones a cuatro empresas, entre ellas Telefónica, para proyectos de I+D en la nube y los chips

Según han explicado a EL ESPAÑOL-Invertia fuentes de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, la concesión de estas subvenciones permitirá a estas cuatro compañías españolas participar en los conocidos como Proyectos Importantes de Interés Común Europeo (PIICE).

Los PIICE (o IPCEI por sus siglas en inglés) están coordinados por la Comisión Europea (CE) y han sido diseñados para agrupar a los sectores público y privado en torno a proyectos transnacionales de gran relevancia y escala estratégica para la Unión Europea (UE).

En concreto, se trata de proyectos de investigación, desarrollo e innovación y primera utilización industrial "muy innovadores" y que no cubran la producción a gran escala ni las actividades comerciales. Además, exigen compromisos de amplia difusión y propagación de los nuevos conocimientos por toda la UE.

Las subvenciones que acaba de conceder la Secretaría dependiente del Ministerio para la Transformación Digital y de Función Pública, que están financiadas con fondos Next Generation, afectan a dos PIICE concretos: el relativo a tecnologías de computación en la nube y en el borde y el relacionado con la microelectrónica y las tecnologías de las comunicaciones.

Cloud 

Para participar en el primero de ellos, el que busca impulsar proyectos innovadores en tecnologías de cloud y edge computing, la Secretaría dirigida por María González Veracruz ha concedido 111 millones de euros a tres empresas españolas: Telefónica, OpenNebula Systems y Arsys Internet. 

Desde la Secretaría de Estado explican a este periódico que la adjudicación de estas subvenciones se ha llevado a cabo a través de una convocatoria en concurrencia no competitiva, dado que la Comisión Europa había autorizado con anterioridad la participación de estas tres empresas en este PIICE concreto. 

Ilustración sobre computación en la nube (cloud computing) EP

Las ayudas se han abonado en tres tramos, el último de los cuales se ejecutará a finales de este mes de junio, y permitirán a España participar en proyectos innovadores relacionados con la infraestructuras de continuidad y las capacidades de la nube al borde de la red (tecnología que se conoce como edge computing). 

Por ejemplo, gracias a estas subvenciones concedidas por el Gobierno, Telefónica instalará 28 nodos edge, una infraestructura que permite el procesado y almacenamiento de datos más cerca de los clientes y de los dispositivos que los generan dichos datos.

Así, las fuentes remarcan que este proyecto, sumado a los distintos programas de ayudas del Gobierno para impulsar el "despliegue temprano" del 5G y a la inversión de las operadoras, permitirá dar un salto "impresionante" en cuanto al desarrollo de la quinta generación de la telefonía móvil en España.

El PIICE de infraestructura y servicios en la nube de nueva generación se desarrollará de forma conjunta entre siete países: Alemania, España, Francia, Hungría, Italia, Países Bajos y Polonia. Los Estados miembros aportarán hasta 1.200 millones de euros de financiación pública, con los que se espera desbloquear 1.400 millones de euros adicionales en inversiones privadas.

Microelectrónica

El segundo de los PIICE en los que la participación de España depende de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales es el relativo a la microelectrónica y las tecnologías de las comunicaciones. En este caso, en gestión compartida con el Ministerio de Industria y Turismo.

En el caso de la Secretaría dirigida por González Veracruz, de la que depende actualmente el PERTE de microelectrónica y semiconductores (más conocido como PERTE Chip), las subvenciones concedidas ascienden a 111 millones de euros y han sido adjudicadas a Openchip Software Technologies.

Openchip, que es un spinoff del Barcelona Supercomputing Center (BSC) tiene como misión el diseño y comercialización de una nueva generación de aceleradores y procesadores de propósito general, con especial énfasis en sus aplicaciones en supercomputación y en inteligencia artificial.

Según explica el BSC, el trabajo de Openchip dará lugar a un chip de bajo coste, de alta potencia de procesamiento y bajo consumo de energía. Desde la Secretaría de Estado, destacan que la compañía tiene una posición "muy competitiva" en el desarrollo de chips con arquitectura RISK-V, un estándar abierto que permite a cualquiera implementarlo sin necesidad de pagar licencias y que está ganando cada vez más popularidad. 

Hace unas semanas, el Ministerio de Industria ya concedió subvenciones por un importe de 65,4 millones de euros a dos empresas españolas que participan en este proyecto europeo. En concreto, se trata de Semidynamics (38,58 millones de euros) y KDPOF (26,82 millones de euros), que canalizarán una inversión total de 124 millones de euros.

Este PIICE ha sido preparado y notificado conjuntamente por catorce países: Alemania, Austria, Chequia, Eslovaquia, España, Finlandia, Francia, Grecia, Irlanda, Italia, Malta, Países Bajos, Polonia y Rumanía. Los Estados miembros aportarán hasta 8 100 millones de euros en concepto de financiación pública, lo que se espera desbloquee otros 13 700 millones de euros en inversiones privadas