Meinrad Spenger, consejero delegado de Masorange, y Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, en una reunión en el Palacio de la Moncloa.

Meinrad Spenger, consejero delegado de Masorange, y Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, en una reunión en el Palacio de la Moncloa. Fernando Calvo Pool Moncloa

Tecnología

Masorange critica la subida del coste para acceder a los conductos de Telefónica tras entrar el Gobierno en su capital

A. M.
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Meinrad Spenger, consejero delegado de Masorange, se ha mostrado muy crítico con la decisión de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) de subir casi un 20% el precio del acceso a la infraestructura física (conductos, arquetas y postes, por ejemplo) de Telefónica. Una medida que, ha recordado, llega "pocos meses después" de que el Estado entrase en el accionariado de su rival.

En un encuentro con la prensa celebrado este lunes recogido por Europa Press, el directivo no ha ocultado su malestar con algunas de las regulaciones del sector, como que la aprobación por parte de Bruselas de la fusión entre Orange y MásMóvil en España se demorase dos años, o el mencionado encarecimiento del acceso a la infraestructura de Telefónica.

"La regulación de competencia es un capítulo que obviamente hay que cambiar. No soy muy optimista, pero es infumable que tengamos que esperar dos años para cerrar una transacción corporativa. Eso no puede ser. Luego, pasan cosas en España. Entra el Estado en Telefónica y, pocos meses después, nos proponen subir los precios de los conductos de la regulación marco prácticamente un 20%", ha señalado.

A este respecto, ha agregado que esto ocurre además en un momento en el que se supone que Telefónica "tiene un margen del 50%, según su propia contabilidad", y ha advertido de que este tipo de normas penaliza las inversiones. "Tenemos más de 17 millones de hogares de fibra propia. Si queremos desplegar más, eso nos penaliza. Eso no puede ser", ha lamentado.

En esa línea, el consejero delegado de Masorange también ha lamentado que España sea en estos momentos "el país de Europa con la presión impositiva más alta" sobre el sector de las telecomunicaciones, algo que, a su juicio, "no tiene mucho sentido".

Ingresos

Pese a todos estos retos, el directivo ha recalcado que Masorange prevé cerrar el ejercicio con una facturación de alrededor de 7.400 millones de euros. Una cifra en línea con la previsión que realizó en abril cuando comenzó sus operaciones tras cerrarse la fusión entre Orange y MásMóvil.

En ese contexto, Spenger ha subrayado que el objetivo del grupo líder del mercado español de las telecomunicaciones por clientes es crecer a base de "apostar por la innovación". Todo ello en un mercado que ha calificado de "complejo" marcado por el alto nivel de competencia que existe.

No obstante, ha confiado en que en Masorange no sólo van a crecer este 2024 en sus principales métricas, sino que también lo harán en 2025. "Damos empleo a casi 8.000 personas y crecemos en todos los parámetros importantes, como ingresos, clientes o nuevos servicios", ha subrayado.