La decisión de Aena de ajustar la capacidad de sus aeropuertos a las necesidades concretas de la operativa, la exención del pago de alquileres o la falta de pasajeros aéreos ponen en riesgo algo más de 100 millones de euros mensuales que de media ingresaba el gestor derivado de su actividad comercial en los aeropuertos.
En 2019, Aena alcanzó los 4.505 millones de euros, un 4,2% más; siendo las división aeronáutica la de mayor peso con unos ingresos de 2.843 millones de euros (un 5,8% más). También destaca los ingresos comerciales (el 27,8% del total) que, con 1.252 millones de euros, un 7,7% más.
De estos, la mayoría corresponden a las tiendas Duty Free (344,8 millones de euros), a restauración (224,9 millones de euros), las tiendas (115.083 millones), aparcamientos (158,8 millones) o alquiler de vehículos (155,9 millones). También destacan los arrendamientos (34,6 millones) o los servicios VIP (78,8 millones). La mayoría de estos servicios no se están prestando.
El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, explicó ayer que el Gobierno va a ayudar a las empresas presentes en los locales de los aeropuertos que ahora mismo no pueden operar. Ábalos ha explicado que se va a articular un mecanismo para que puedan no pagar a Aena los alquileres y los acuerdos pendientes mientras continúen las obligaciones de cierre.
Si bien es cierto, el Gobierno asegura que se mantienen abiertos algunos servicios de restauración en los principales aeropuertos de la red, así como cantinas de empleados. Además, permanecen abiertas diversas tiendas de prensa y conveniencia, que venden artículos de alimentación y bebidas, y se presta especial atención al abastecimiento de las máquinas vending. No obstante, y como el lógico, los ingresos comerciales bajarán mucho.