El grupo IAG acaba de registrar unas pérdidas récord de 5.567 millones de euros en los nueve primeros meses del año. El grupo se prepara para lo peor ya que espera que la demanda de pasajeros tarde al menos hasta 2023 en recuperar los niveles de 2019. Por ello, está reestructurando su base de costes para reducir el tamaño de las cinco principales aerolíneas del grupo: Iberia, Vueling, Level, British Airways y Aer Lingus.
“En cuanto a mis prioridades, creo que en primer lugar tenemos que continuar con el proceso de reestructuración que tenemos en marcha; tenemos que seguir reduciendo nuestra base de costes”, señaló Luis Gallego, el presidente y consejero delegado de IAG, tras presentar los resultados trimestrales.
Y es que IAG ya anunció un duro plan de ajustes que poco a poco se va cumpliendo. En el caso de Iberia, su plantilla continúa en un ERTE hasta finales de enero (inicialmente afectó a 14.000 empleados). Dependiendo de su extensión, la compañía iniciará antes o más tarde las negociaciones con los sindicatos para aplicar los primeros ajustes de empleo, según fuentes sindicales.
Para IAG, los ERTE “permiten a las aerolíneas ajustar mejor los costes de los empleados con la capacidad”. Así, IAG ha obtenido reducciones mensuales de 25 millones de euros desde abril gracias a los ERTE. También ha disminuido el sueldo entre un 10-45% a los empleados (en función de su antigüedad).
Y es que ya lo avanzó el presidente de Iberia, Luis Gallego, a principios de verano: la flota de Iberia va a ser más pequeña el próximo lustro. A pesar de esta difícil situación, la compañía mantiene en pie la compra de Air Europa; pero con condiciones.
Vueling
Con el ERTE de Vueling y los planes en Francia e Italia, IAG ha conseguido un beneficio mensual de aproximadamente 10 millones de euros desde abril. También ha llevado a cabo la eliminación del 20% de puestos gerenciales y el recorte salarial del 18%.
Además, Vueling llegó a un acuerdo con los 1.000 pilotos en sus bases españolas. Estos aceptan una importante rebaja salarial acorde a la reducción de la producción de la compañía.
Para mantener el empleo, los pilotos estarán bajo la figura del ERTE, repartiendo los vuelos de manera equitativa entre toda la plantilla. “El acuerdo se alarga hasta diciembre de 2021, excepto si se producen cambios en los ERTE”, señalan fuentes cercanas de la empresa a Invertia.
En los casos de cierre de bases, los pilotos de dichas bases tendrán la oportunidad de trasladarse de manera voluntaria Barcelona, o a determinados destacamentos (bases temporales) que abra la compañía en función de las previsiones de tráfico aéreo.
British Airways
El objetivo de IAG con British Airways pasa por alcanzar ahorros anuales en los costos de los empleados de aproximadamente el 30% como resultado de la reestructuración, contratos de empleados más competitivos y mayor flexibilidad para variar el costo total con la capacidad.
Hasta finales de octubre, un total de 9.620 empleados se han ido de la aerolínea británica mediante una combinación de despidos voluntarios (80%) y obligatorios acordados con los principales sindicatos. Se espera que otros 180 trabajadores se vayan a principios de 2021.
El Grupo ha retirado anticipadamente aviones con más años de servicio y ha devuelto algunos aviones más antes del fin de los contratos de arrendamiento. En este sentido, destaca la retirada de la flota de Boeing 747 de British Airways y de la flota de Airbus A340-600 de Iberia.
Aer Lingus y Level
En el caso de Aer Lingus, también se han beneficiado del plan de Irlanda (CTWSS) desde abril. Aer Lingus ya ha planificado el despido de 250 trabajadores de un total de 4.500 y trasladará a 200 empleados dedicados a funciones de catering a una empresa externa.
También aplica recortes salariales del 50% para todo el personal a partir de abril de 2020 y tira de contrataciones temporales. Con estas medidas espera reducir un 50% los costes laborales anuales.
Así, IAG ha reconocido un gasto excepcional de 275 millones de euros en el tercer trimestre en relación con las reestructuraciones de plantilla en British Airways y Aer Lingus.
Por su parte, Level cerrará sus bases en Ámsterdam, Viena y París (sujeta aún a consulta esta última) y despedirá a 430 trabajadores. No obstante, fortalecerá la base de Barcelona con vuelos a Buenos Aires y Nueva York JFK. Ya anunció que reducirá su flota de siete a dos aviones A330.
Reducción del 30%
Los recortes y ajustes de plantilla llevados a cabo han tenido sus primeros frutos. Los gastos de personal antes de partidas excepcionales para el periodo de nueve meses finalizado el 30 de septiembre descendieron 1.115 millones de euros comparado con 2019.
"Casi la mitad de este descenso se debió a los despidos temporales y otros programas de reducción temporal de costes, junto con las reducciones en la jornada o en el sueldo que se aplicaron durante el segundo y tercer trimestre", según el grupo dirigido por Gallego.
Las reducciones se registraron a todos los niveles y en todas las funciones dentro del grupo. Pero a pesar de todas estas medidas, la reducción de los costes de personal del 30% fue menor que la caída del 64,3% que experimentó la capacidad de pasajeros y, como consecuencia, los gastos unitarios de personal a tipos de cambio constantes aumentaron un 94,4%.