El año 2020 probablemente pasará a la historia como el peor para el transporte aéreo. La Covid obligó a dejar los aviones en tierra y aerolíneas como Iberia lo sufrieron. La compañía, que aprovechó para renovar flota, finalizó el año 2020 con una plantilla de 15.166 empleados, un 13,1% menos, según el Informe de Sostenibilidad 2020 de Iberia.

El personal de tierra nacional es el más afectado por las bajas al cerrar el año con 10.354 empleados (1.828 menos que en 2019), seguido de los tripulantes de cabina con 3.194 trabajadores (397 menos) y de pilotos con 1.361 (45 menos). El personal local extranjero se situó en 257 (22 menos). En total, 2.292 puestos de trabajo menos. 

En total, 15.166 empleados que suponen la cifra más baja de trabajadores de al menos los últimos diez años. En este periodo de tiempo, la evolución del personal muestra su tope en 2012 con 20.610 trabajadores. En ese año, la compañía puso en marcha un ERE (un año después de la fusión de Iberia y British Airways que daría lugar al grupo IAG).

A partir de entonces, la cifra de empleados baja hasta 16.564 en 2016. Luego, se empieza a incrementar de nuevo hasta los 17.458 de 2019. Y, el año pasado, la Covid frenó la buena racha y asestó un recorte del 13% del personal. 

ERTE de Iberia

Debido a ello, en marzo de 2020, Iberia se vio obligada a presentar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) tras la situación excepcional provocada por la pandemia. Con una plantilla de más de 17.000 empleados (a cierre de 2019), el máximo al que afecta se fijó en 13.900 trabajadores.

Hasta la fecha, la aerolínea no ha levantado totalmente el ERTE y lo mantiene de forma parcial. Es decir, su personal trabaja en función de la actividad “con el fin de repartir la carga de trabajo a partes iguales”, según explicaron a Invertia fuentes de la compañía.

Una medida de flexibilidad dada la situación de incertidumbre que implica que haya trabajadores que prefieran estar de forma voluntaria en el ERTE y que entre el resto se haga un reparto en función de la actividad que, según la compañía, en junio será del 50% y en julio del 60%. 

Renovación de flota

A pesar de los efectos de la pandemia, en 2020 Iberia continuó con la renovación de sus aviones: incorporó tres aviones Airbus A350, dos A320neo y retiró sus últimos nueve Airbus A340/600, “lo que le ha permitido seguir reduciendo la edad media de su flota y disponer de aviones de última generación, más eficientes y sostenibles”, según la memoria de la compañía aérea. 

De esta forma, el grupo Iberia cerró con una flota de 131 aviones: 67 aviones de Iberia, 42 de Air Nostrum y 22 de Iberia Express. En 2021, la compañía continuará con esta renovación y tiene prevista la entrega (aún sin confirmar) de tres A350-900 y otros tres A320 Neo.

Nuevos negocios

La situación de la Covid también obligó a la compañía a potenciar negocios que no han dejado de crecer en la pandemia. Por eso, Iberia apostó por los vuelos chárter y la carga. En octubre de 2020, transformó en cargueros tres Airbus A330 que han operado a Los Ángeles, Santiago de Chile y Tel Aviv, entre otros destinos, y que la aerolínea ya ha devuelto a su configuración original.    

Por otro lado, Iberia Airport Services, la unidad de negocios de aeropuertos de Iberia, también orientó su actividad al transporte de mercancías y atendió a más de 160.000 aviones de más de 200 compañías clientes. De esos aviones, cerca de 3.300 eran cargueros, casi un 30% más que en 2019.

Por su parte, Iberia Mantenimiento también adaptó su actividad a las necesidades de sus clientes y ofreció servicios de parking y preservación a más de 140 aviones.

Además, en plena pandemia Iberia realizó 50 vuelos a más de 20 destinos internacionales para repatriar a españoles y se convirtió en la primera aerolínea en transportar vacunas hasta nuestro país. Hasta entonces habían sido llevadas en dispositivos especiales por carretera, helicóptero o en aviones militares. 

Ese primer cargamento de vacunas de Pfizer llegó procedente de Bruselas el día 28 de diciembre de 2020. Los dos palés, de 66 y 69 kg respectivamente, llegaron a Madrid en un avión carguero de Iberia/IAG Cargo. El destino final de estas vacunas fue Tenerife y Gran Canaria, transporte que también fue realizado por Iberia.

Desde entonces, ha transportado casi dos millones y medio de dosis, sobre todo a Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla, pero también a otros países en América Latina como Ecuador, El Salvador, Perú y República Dominicana, entre otros.