La erupción del volcán de La Palma comienza a generar cierto temor en el sector turístico. A las puertas de que arranque la temporada alta en Canarias, empresarios locales y agencias de viajes temen que la situación del volcán en activo se prolongue y sea un problema que se sume a la mala imagen provocada por la inmigración y la pandemia. 

“Lo malo es que viene tras la Covid y los problemas de inmigración que han causado mala reputación a un destino tan especial”, reconocen desde la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV). 

De esta imagen ya avisó hace un mes la diputada de Coalición Canaria en el Congreso, Ana Oramas. Advirtió de que la situación que vive Canarias con la llegada masiva de inmigrantes al archipiélago era "mil veces" que la de Ceuta y ahora que se trataba de recuperar el turismo, no puede permitirse que la imagen no sea la de "miles de personas que huyen del hambre y, en muchos casos, de la guerra".

Con la erupción del volcán, aún es pronto para determinar el impacto turístico que podría tener a medio y largo plazo en todo el archipiélago; aunque a corto plazo el sector turístico coincide en que es negativo. 

De momento, es en La Palma donde se están recibiendo las primeras cancelaciones de viajes. “Se están produciendo cancelaciones de festivales, conciertos y corporate (viajes de negocios) ya que La Palma en septiembre y octubre tiene muchas actividades culturales y deportivas que se han ido al traste”, apuntan empresarios locales. 

“Para las agencias de viajes está siendo nefasto. Algunas empresas de rent a car y alojamientos están cancelando sin gasto adicional. Algo que no ocurre con las compañías domésticas”, reclaman agencias locales, que prevén daños económicos incalculables. 

Además, a esta situación de cierta incertidumbre hay que sumar otro problema para Canarias: aún no se ha adjudicado el concurso público del Imserso, cuyo inicio estaba previsto para el próximo mes de octubre. 

La última noticia es que el pasado lunes se abrieron los sobres para la licitación del Imserso y hay tres empresas que optan a ella: Traveltino (operador de Logitravel) y las dos UTE que ganaron en 2019 el concurso: Mundiplan (Iberia, IAG7 Viajes y Alsa) y Turismo Social (antigua Mundosenior, formada por Globalia y Barceló).

Tranquilidad en Meliá

Pero de momento, la prudencia prima en gran parte del sector turístico. “Estamos seguros de que cuando pase esta crisis habrá una campaña de promoción y recuperación de este destino paradisiaco, y habrá mucho interés por parte de los viajeros, como ha ocurrido en otras erupciones pasadas. Pero el impacto a corto plazo dependerá de la duración de la erupción, que no conocemos”, señalan fuentes de Meliá. 

Uno de sus hoteles, el hotel Sol La Palma (con 308 habitaciones de hotel, más 165 apartamentos), fue evacuado por orden gubernamental el domingo por la tarde llevando a los clientes a un punto seguro. El lunes, Meliá trasladó a más de 350 huéspedes a dos hoteles de su grupo en el sur de Tenerife, mientras el resto optó por otras soluciones con sus turoperadores.

“Por ahora esta contingencia tiene un impacto económico limitado y que, aunque no sabemos cuánto tiempo estará en erupción, no prevemos mayores consecuencias para el turismo de Canarias, ni siquiera para La Palma”, explican.

Reclamo turístico

La nota turística más polémica la puso la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, quien declaró el lunes que la erupción del volcán es un "reclamo" para la isla, por lo que trabajarían para atraer viajeros en este sentido. Es verdad que matizó sus palabras después por el revuelo inicial que causaron. 

Cierto es que una parte del sector cree que este tipo de fenómenos naturales tienen un doble efecto parecido al que defiende la ministra. El primero es que, al hablarse a nivel internacional, se puede posicionar en el mapa a la isla. Y, el segundo, es que hay gente que se desplaza únicamente para ver este tipo de espectáculos de la naturaleza. 

Por otro lado, desde la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel) han aprovechado para pedir que se prorroguen los ERTE hasta el 31 de enero de 2022 en las mismas condiciones que las actuales debido a esta situación.