El Govern balear ha aprobado este viernes "un bloqueo de todas las plazas turísticas de Baleares, vacacionales y hoteleras, en las cuatro islas", durante cuatro años, ha anunciado la presidenta del Govern, Francina Armengol, con el objetivo de reducirlas, "no apostar por la cantidad sino por la calidad".
Según indica Efe, la moratoria forma parte de la reforma de la ley de turismo de Baleares, que ha aprobado este viernes el Ejecutivo autonómico en un Consell de Govern extraordinario. Implica que no se podrán adquirir plazas turísticas para su comercialización en las islas en los próximos cuatro años.
Armengol ha detallado en la presentación del decreto que los 'consells' insulares, que son los que tienen la competencia, harán la adecuación o no de esas plazas que tienen disponibles o bien quedarán extinguidas definitivamente dentro de 4 años.
Esta moratoria afecta a las 18.718 plazas hoteleras y de alquiler turístico, que en el caso de la bolsa de Mallorca son en la actualidad 8.486, en Ibiza 7.000 y en Formentera 3.232.
El consejero de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, ha detallado que se bloquean las bolsas de plazas "para que tiendan a la reducción". Solo Menorca carece de bolsa de plazas y "dispone de 4 años para crearla y establecer cómo será su mecanismo".
Turismo circular
"Nos queremos convertir en el primer destino turístico circular del mundo", ha afirmado Armengol, que ha explicado que la norma comporta "tres patas", con una apuesta por la circularidad y la sostenibilidad y el uso adecuado de recursos como la energía y el agua, y la gestión de los residuos; la mejora de las condiciones laborales en el sector; y la modernización de los establecimientos por medio de facilidades.
Armengol ha dicho que el Govern, consciente de la exigencia de invertir recursos económicos que supone la norma para el sector, aportará 60 millones de euros en ayudas directas para su aplicación, a lo que espera que puedan agregarse fondos europeos.
En materia de modernización de los establecimientos turísticos, la norma da cuatro años para poder hacer reformas por medio de una declaración responsable, y la norma permite crecer un 15 %, no en altura, "pero introduciendo que el crecimiento que se permite en la reforma tiene que ser con reducción de plazas de un 5 %", ha detallado Negueruela.
La intención es que se reforme el 30 % de la planta que se estima que falta por renovar, que son principalmente los establecimientos "más pequeños, los que han quedado y los que necesitan más inversión".
Clasificación
Además, se simplifica la clasificación de los establecimientos turísticos y se moderniza introduciendo sobre todo criterios de calidad en el servicio. Se crea la categoría de Hoteles Saludables, que deberán tener una categoría mínima de 4 estrellas.
El vicepresidente del Govern, Juan Pedro Yllanes, ha destacado que la reforma legislativa "supone un punto de inflexión", tras la lección de la pandemia de que el éxito de Baleares "no puede depender de los millones de turistas que llegan sino de la calidad de la economía empezando por el turismo".
Ha destacado que establece la obligatoriedad de que todos los hoteles tengan un plan de circularidad en el plazo de un año y eliminen las calderas de combustibles fósiles en calderas y las sustituyan por instalaciones renovables.
La norma incluye lo ya anunciado en Fitur de la obligatoriedad de que todos los hoteles cambien las camas por otras elevables en un plazo que se ha extendido de 5 a 6 años. La medida que implica renovar 300.000 camas y beneficiará a más de 20.000 camareras de piso.