Boeing ha anunciado un plan de venta de acciones por valor de casi 19.000 millones de dólares (17.564 millones de euros) para aumentar su liquidez y evitar una posible rebaja de su calificación crediticia, impulsado por la huelga de sus trabajadores en Seattle (Estados Unidos), que enfila su séptima semana.
En concreto, el fabricante compañía ofrece 90 millones de acciones ordinarias y alrededor de 5.000 millones de dólares (4.621 millones de euros) en acciones depositarias, según un comunicado de este lunes.
Así, el objetivo es utilizar los beneficios para fines corporativos generales, que pueden incluir, entre otras cosas, el pago de la deuda, las adicciones al capital de trabajo, los gastos de capital y la financiación y las inversiones en las filiales de la compañía.
Goldman Sachs & Co LLC, BofA Securities, Citigroup y JP Morgan actúan como principales gestores conjuntos de las ofertas, mientras que Wells Fargo Securities, BNP Paribas, Deutsche Bank Securities, Mizuho, Morgan Stanley, RBC Capital Markets y SMBC Nikko también actúan como 'joint bookrunning managers'. Por su parte, PJT Partners es el asesor financiero de Boeing.
La pasada semana los trabajadores en huelga rechazaron la última propuesta de la compañía, que recogía una subida salarial del 35% en cuatro años, por lo que continúan con los parones que iniciaron hace más de un mes, el pasado 13 de septiembre. De los 33.000 trabajadores en huelga, el 64% votó en contra de la propuesta.
Triplica sus pérdidas
La huelga ha costado a la compañía norteamericana decenas de miles de millones de dólares y las agencias de calificación crediticia han avisado del riesgo de acabar siendo catalogada como 'basura'.
Además, el fabricante anunció los nuevos resultados trimestrales, triplicando sus pérdidas netas hasta los 7.968 millones de dólares (7.398 millones de euros) entre enero y septiembre, un 260% más que los 2.212 millones de dólares (2.053 millones de euros) del mismo periodo de 2023.
En este contexto, el consejero delegado del fabricante, Kelly Ortberg, admitió en un comunicado que "llevará tiempo devolver a Boeing su antiguo legado, afirmando que, con el enfoque y la cultura "adecuados", puede volver a ser "una empresa emblemática y un líder aeroespacial".
"De cara al futuro, nos centraremos en cambiar fundamentalmente la cultura, estabilizar el negocio y mejorar la ejecución de los programas, al tiempo que sentamos las bases para el futuro de Boeing", añadió.