Las cinco aerolíneas ‘low cost’ pedirán medidas cautelares para mantener el cobro por equipaje de mano

La orden de Consumo pone fin a la vía administrativa y ahora se abre una vía judicial y un plazo de dos meses para interponer un recurso. “Todas van a presentar los recursos administrativos y la puesta en marcha de medidas cautelares”, ha asegurado el presidente de Asociación de Líneas Aéreas (ALA), Javier Gándara. De hecho, Ryanair ya ha anunciado que apelará la decisión.

En principio, cada aerolínea apelará de forma individual y pedirán medidas cautelares para la prohibición de cobrar por el equipaje de mano, que es la práctica por la que mayores multas han recibido estas compañías aéreas y la que más afecta a los negocios de las mismas. 

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Cabe recordar que también han sido sancionadas por reservar asientos contiguos, por cobrar por la impresión de la tarjeta de embarque, por no permitir el pago en metálico en los aeropuertos españoles y por la falta de claridad en los precios publicados tanto en su propia web como de terceros.

Gándara confía en que estas medidas cautelares sean aceptadas. “Confiamos en que la vía judicial nos dará la razón”. Y en cuanto a los plazos, hay dos meses para resolver si habrá medidas cautelares o no. Después, el proceso judicial podría alargarse “uno o dos años”, añade. 

Si las compañías consiguen las cautelares, “no va a suponer ningún cambio de momento en las políticas comerciales en materia de equipaje de mano”, señala el presidente de ALA. 

Si no es favorable y las cautelares son rechazas, Ryanair, Vueling, Volotea, EasyJet y Norwegian tendrán que acatar la decisión administrativa y quedarían a la espera de la decisión judicial. Siendo esto un problema si finalmente la justicia les da la razón ya que ya se habrían visto afectadas por cambios en sus políticas comerciales. 

Sentencia del TJUE

Asimismo, ALA ha tachado la decisión de “sinsentido” pues sitúa a España como el único país de la UE donde se quiere prohibir las prácticas de cobro por equipaje en cabina. Además, en su opinión es “una injerencia ilegal y atenta contra la libertad de mercado”, suponiendo “un agravio comparativo respecto a los países de nuestro entorno donde esta práctica no está vetada”.

Gándara cree que los argumentos esgrimidos por el Ministerio de Consumo basados principalmente en la sentencia del TJUE de septiembre 2014 “suponen una interpretación retorcida de la misma”. 

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Cabe señalar que todas las compañías aéreas permiten a los pasajeros llevar consigo de forma gratuita una pieza de equipaje de mano siempre que quepa en el asiento delantero puesto que atienden a las exigencias razonables relativas a su peso y dimensiones. 

Desde ALA se recalca que la resolución del ministro Bustinduy va en contra de la normativa europea, concretamente el principio de libertad de fijación de precios reconocido en el Reglamento UE 1008/2008, que debe recordarse que es de obligado cumplimiento en los Estados miembros.

Por lo que recuerda que “la decisión de Consumo de aplicarse podría perjudicar grave e irreversiblemente a los consumidores y obligaría a 50 millones de pasajeros que viajan sin trolley en cabina a pagar por un servicio que no necesitan”.