Carlos Herrera vuelve a negociar con Cope a seis meses del fin de su contrato

TVE canceló el domingo pasado el programa ¿Cómo lo ves? de Carlos Herrera, después de seis emisiones. Sin duda un mal trago para el comunicador cuyo retorno a la cadena pública ha terminado de manera anticipada, por bajas audiencias y a pesar de que se había comprometido con 13 programas.

Una cancelación que el propio Herrera se encargaba de confirmar en sus redes sociales haciendo un guiño a su trabajo en Cope. “Si los resultados no acompañan, el trabajo se acumula en radio y el día supone un handicap personal lo mejor es acordar un amable cese de esfuerzo”.

Estas palabras cobran especial interés si consideramos que el contrato de Carlos Herrera en Cope expira en junio de 2018 que todavía no llega a un acuerdo con la emisora de los obispos para su renovación.

Herrera pierde la bala de la televisión

La puesta en marcha de ¿Cómo lo ves? fue interpretada en muchos círculos como un handicap para esta renovación y el principio de una carrera en televisión que no era complementaria con su trayectoria en Cope en el largo plazo. Otras fuentes indican, no obstante, que el fichaje de Herrera por TVE nunca estuvo ligado con su continuidad en la cadena de los obispos.

De esta manera, el fin del programa no es una mala noticia para el presidente de Cope Fernando Jiménez Barriocanal y el director general Julián Velasco. Sin televisión, Herrera tiene menos elementos para negociar ya que no cuenta con esta alternativa donde marcharse si es que se cierra la puerta de Cope. 

Como contamos en EL ESPAÑOL, antes del verano Herrera y Cope tuvieron los primeros acercamientos, pero sin llegar a ningún acuerdo. Y desde entonces están jugando una compleja partida de ajedrez en la que Herrera ha apostado por el despiste diciendo públicamente que su interés es reducir su peso en el día a día de la radio y que "quiere pasar a la reserva".

Herrera terminará renovando en Cope

Con todo, a partir de este mes de diciembre se prevé que vuelvan a sentarse a negociar y que se comiencen a concretar algunos puntos del nuevo contrato. Nadie duda que Herrera terminará renovando en Cope, pero la firma se ha dilatado porque la emisora no acepta todas las condiciones que pide el comunicador andaluz. 

Estos acercamientos se ha programado después de conocerse los resultados del Estudio General de Medios (EGM) que se harán públicos el próximo 30 de noviembre. Recordemos que en el último EGM del verano Herrera consiguió 1.881.000 de oyentes, su peor dato desde que está en Cope y su registro más bajo en siete años.

De mantenerse estas cifras, la directiva de la emisora tendrá más elementos para negociar, aunque de producirse un subidón de audiencias Herrera obtendrá más poder para imponer sus condiciones.

Duración del contrato y horas en antena

En el centro del debate están las horas de programa del comunicador y la duración de su contrato. El objetivo de Herrera es reducir su exposición, que actualmente se extiende desde las seis de la mañana hasta la una de la tarde, de lunes a viernes. En muchas ocasiones ha indicado que su intención es comenzar una retirada progresiva y, que a sus 60 años, quiere dosificarse.

No obstante, para Cope es fundamental que el periodista esté en antena el mayor número de horas posibles por su tirón con los anunciantes, muchos de los cuales piden expresamente estar en Herrera en Cope. Desde la llegada de Herrera, el éxito comercial de Cope ha aumentado exponencialmente.

Quedan seis meses de contrato 

El segundo punto es la duración del contrato, que está directamente ligado con la primera condición. Herrera quiere renovar año a año rehuyendo un contrato de larga duración. Las dos partes se comprometieron a tres años en verano de 2015 y la idea de Cope es hacerlo por tres años más, aunque no verían con malos ojos hacerlos por dos temporadas.

Como ya ha publicado este periódico, el objetivo de la cadena es confirmar y anunciar la renovación de Herrera cuanto antes, para dar tranquilidad a sus oyentes y a sus anunciantes, aunque el comunicador no lo tiene tan claro. Todo se deberá resolver en los próximos seis meses.