Amazon quiere que su plataforma de televisión Prime Vídeo esté disponible en el mayor número de operadores posible. La estrategia audiovisual del gigante del comercio electrónico se centra en dos pilares: engordar su catálogo de contenidos y aumentar su número de suscriptores -actualmente en un número testimonial en el mercado español- con el objetivo final de poder aumentar sus ingresos por la comercialización de sus contenidos audiovisuales.
Una estrategia que en España pasa por cerrar alianzas con las principales telecos españolas, bien firmando acuerdos de integración en sus plataformas o con pactos de comercialización conjunta. Las informaciones confirmadas por EL ESPAÑOL indican que durante los últimos meses, directivos del área de contenidos audiovisuales de Amazon se han reunido con todas las operadoras de telecomunicaciones y que estarían cerca de cerrar un acuerdo definitivo con alguna de ellas.
Las fórmulas para estar presente en las telecos serían similares a la que ya mantienen Netflix con Orange y Vodafone y HBO con la operadora británica. Netflix también ultima un acuerdo con Telefónica para integrar sus contenidos en la interfaz de Movistar+. En el caso del acuerdo de Amazon con las operadoras estaría más en la línea de una comercialización conjunta, en la que Prime vídeo cobre a estas plataformas un fijo por cliente. Estos acuerdos que verían la luz “en los próximos meses”, según ha sabido este periódico.
Las telecos abren la puerta a las colaboraciones
En las últimos días, Movistar, Vodafone y Orange han coincidido públicamente en que la manera de mejorar la experiencia de sus clientes es aumentando las alianzas con proveedores de todo tipo de servicios. En este punto, la colaboración con los dueños de la producción audiovisual es clave para seguir ofreciendo mejores contenidos a sus usuarios, en plena guerra de precios y en búsqueda de la consolidación de sus bases de clientes.
Por su parte, Amazon está en plena etapa de crecimiento de Prime Video en todo el mundo y para rentabilizar su fuerte inversión en contenidos necesita aumentar sus suscriptores. En España ha engordado su catálogo audiovisual con contenidos locales tras el gran acuerdo que alcanzó en diciembre con los tres gigantes audiovisuales españoles: Mediaset, Atresmedia y RTVE.
En el caso de Mediaset, han comprado los derechos de El accidente, La Verdad, Sé quién eres, Perdóname, Señor, El Príncipe y todas las temporadas de La que se avecina. También se podrán ver El padre de Caín, Anclados, El Rey, La Duquesa, La Fuga, Rabia y Hay alguien.
Puja por derechos deportivos
Atresmedia ha cedido los derechos de emisión de series como El tiempo entre costuras, Vis a Vis, Velvet o El Barco. También se podrán ver Presunto Culpable y Matadero, aún en fase de rodaje. RTVE cedió los derechos de sus producciones más recientes, entre ellas Estoy vivo, Reinas, Isabel y Carlos, Rey Emperador. Series que se suman a contenido propio como Man in the High Castle, The Grand Tour, Transparent y Mozart in the Jungle.
Estos movimientos también incluyen la entrada de Amazon en la puja de los derechos audiovisuales. En el caso de la Premier League inglesa no se quedó con ningún lote, a pesar de anunciar extraoficialmente que pujaría fuerte por estos derechos.
En España, el objetivo es presentarse a la subasta que lanzará la Liga entre abril y mayo, en principio para quedarse con un paquete complementario. No obstante, EL ESPAÑOL ha informado de su interés de intentar quedarse con los partidos más atractivos, aunque buscando precisamente a una teleco para poder presentar una oferta más competitiva.
Estrategia para subir el precio
En el foco de toda esta estrategia se encuentra la necesidad de Amazon de subir el precio a sus contenidos audiovisuales. Desde su llegada a España, Amazon Prime (incluso después de incluir los contenidos audiovisuales de Prime Video) cobra 19,95 euros al año, por los 7,99 euros mensuales del plan básico de Netflix y de HBO.
En el mercado se especula con que el alza de precios oscilaría entre los 20 y 40 euros anuales respecto de los valores que se cobran hasta ahora. En un primer momento, se dijo que el alza se aplicaría en octubre, pero ha quedado postergada y probablemente se ejecute durante el primer trimestre de este año.
En enero el gigante del comercio electrónico aumentó en un 18,2% el precio de la cuota mensual de su servicio Prime en Estados Unidos, desde los 10,99 dólares hasta los 12,99 dólares, aunque mantiene la tarifa anual en 99 dólares. La clave está en dar más servicios por un mayor precio. Y en esta filosofía encaja la posibilidad de tener más ventanas en las operadoras de telecomunicaciones para llegar a nuevos clientes.