Siguen las malas noticias para los Lara. Su inversión en Atresmedia se ha desplomado progresivamente en los últimos tres años coincidiendo con la muerte del patriarca José Manuel Lara Bosch y con el ascenso de José Creuheras como presidente del grupo audiovisual en febrero de 2015. De esta manera, la gestión del primer directivo de Planeta ha costado a la familia Lara 734 millones de euros en Bolsa.   

Durante el primer trimestre de 2015, la acción del grupo Atresmedia alcanzó máximos históricos de la década con 13,57 euros. Tres años y medio después, la compañía que controla Antena 3 y La Sexta se ha hundido hasta los 5,77 euros a los que cerró este lunes. Un desplome del 43% en estos tres años. El grupo ha perdido 1.761 millones de euros de su capitalización bursátil en este periodo hasta los actuales 1.302 millones.

Un impacto que ha afectado duramente al patrimonio de la familia Lara. A través de la sociedad Pasa Cartera y Planeta de Agostini tiene el 41,7% de la compañía. Esto significa que hasta el desembarco de Creuheras, la participación del mayor editor de libros en español estaba valorada en 1.277 millones. Según la cotización del cierre del mercado del lunes, el paquete representa solo 542 millones de euros, una minusvalía de 734 millones durante la gestión del actual presidente.

Gestión de Creuheras en entredicho

Un roto que no pasa desapercibido en la familia Lara, que ve cómo su inversión más importante se ha desplomando desde la muerte de Lara Bosch y sin que lo haya podido evitar el hombre elegido por los herederos para cuidar sus inversiones. 

Según los analistas bursátiles, el valor de la acción se ha desplomado por los vaivenes del mercado y el hundimiento de las expectativas en la televisión en abierto. La llegada de nuevos actores como Netflix ha generado un efecto en cadena que ha reducido el consumo lineal y ha hecho a los anunciantes replantearse sus inversiones. En este contexto Atresmedia se ha comportado peor que su principal competidor, Mediaset, que mantiene su valor en Bolsa por encima de los 2.100 millones, 800 por encima del editor de Antena 3.

De esta manera, se culpa a Creuheras por no realizar la necesaria diversificación de la compañía. Se le acusa también de estar más centrado en los manejos políticos y en el uso de sus medios informativos al servicio del poder que en intentar sacar rendimiento y valor al segundo grupo audiovisual español.

Disolución de Hemisferio

La situación de la inversión de Planeta en Atresmedia se produce en el peor momento para los Lara. EL ESPAÑOL ya publicó que Inversiones Hemisferio, el vehículo que articula toda la inversión de las cuatro ramas de la familia, se encuentra en proceso de liquidación, lo que en unos meses desembocará en el cierre de la sociedad.

Esto significa que la familia perderá al menos 400 millones de euros, el equivalente a los activos computados en los libros de la sociedad al momento de su cierre. Esta liquidación se ha puesto en marcha después de que la patrimonial realizase un duro proceso de ajustes y de ventas para saldar su deuda de más de 700 millones de euros y tras esquivar in extremis el concurso de acreedores al que se vio abocada a comienzos de este año.

En menos de seis meses la sociedad patrimonial ha vendido la sede histórica de Planeta en la Avenida Diagonal de Barcelona -propiedad de los Lara- por 210 millones, ha entregado sus acciones del Banco Sabadell a la propia entidad bancaria por valor de otros 200 millones y ha vendido la editorial francesa Editis recibiendo 200 millones por su parte en la editorial. Sabadell ha aceptado una quita de 80 millones para poder condonar las deudas de la entidad patrimonial.

Lucha familiar

El hundimiento de la inversión patrimonial y de la acción de Atresmedia coincide con la lucha familiar de los Lara, que se agudizó tras la salida de José Manuel Lara García como consejero delegado de Planeta en febrero de este año y del consejo de Atresmedia meses después. Creuheras y su equipo dieron un golpe para apartar al heredero de Lara Bosch tras tres años de difícil convivencia.

El golpe de Creuheras se pudo producir con el apoyo de las tías de Lara García, fundamental para seguir sosteniendo al presidente de Planeta al mando de la compañía. Unos apoyos que en las últimas semanas están en entredicho. Planeta está controlada por los hijos del fundador, José Manuel Lara Hernández: Inés y Maribel Lara Bosch y los herederos de José Manuel y Fernando, ya fallecidos. Las hermanas tienen un 24% del capital cada una y los herederos de los hermanos suman otro 52% a partes iguales.