El grupo Prisa ha cerrado este miércoles los principales detalles de su ampliación de capital aprobada el pasado 26 de febrero por 200 millones y para costear la compra del 25% del grupo Santillana a Victoria Capital Partners. La compañía ha fijado un precio de 1,33 euros por acción, por encima del 1,20 euros de la anterior ampliación de capital con la que se restableció el equilibrio patrimonial de la compañía.
Del mismo modo, Prisa ha confirmado que Banco Santander, Morgan Stanley y Alantra Capital Markets asegurarán la operación en un contrato que se ha firmado también este miércoles. La ampliación con suscripción preferente tendrá un precio por acción de 0,94 euros de valor nominal y con una prima emisión de 0,39 euros cada una.
Esto significa que se abrirá un proceso inicial en el que los actuales accionistas podrán adquirir las nuevas acciones para lo que la compañía cuenta con "los compromisos irrevocables y manifestaciones de interés recibidos de algunos de los principales accionistas de la sociedad, los cuales representan aproximadamente el 42% de las nuevas acciones a emitir".
Accionistas relevantes
Según ha confirmado EL ESPAÑOL, los accionistas que han manifestado su intención de acudir a la ampliación son Amber, primer accionista con un 27% de la compañía; Khalid bin Thani Al Thani que posee el 6,5% del grupo, Banco Santander con el 4,1% y el empresario mexicano Carlos Fernández con el 4%. El propio presidente no ejecutivo de la compañía, Javier Monzón, ha liderado las conversaciones con los accionistas para convencerles de participar en la operación.
Prisa además ha indicado que "junto con los compromisos de suscripción y manifestaciones de interés recibidos de ciertos accionistas significativos de la sociedad, cubren el 100% de la ampliación con derechos". Dentro de los accionistas significativos que aún no han confirmado formalmente su participación encontramos a Telefónica que posee un 9,4%, HSBC que tiene un 10,1% o los herederos de Jesús de Polanco que todavía tienen un 8,4% del capital.
La compañía aprobó en febrero del año pasado otra ampliación de capital de 563,2 millones de euros, que se convirtió en una de las piedras angulares de su última refinanciación con la banca y le salvó del desequilibrio patrimonial. En esta operación grandes empresas españolas como Telefónica diluyeron capital, es decir no se presentaron a la ampliación y, por tanto, redujeron su participación en el nuevo reparto accionarial. Un movimiento en el que Caixabank se diluyó por completo y abandonó el accionariado del grupo.
Refinanciación de la deuda
Durante 2018 Prisa acordó con la banca acreedora el aplazamiento del vencimiento de la deuda hasta finales de 2022 con un primer pago de 450 millones y un calendario de amortización ajustado a la generación de caja de la compañía. Cerrada la refinanciación el grupo ha emprendido un plan de negocio para generar valor. En este punto se encuentra la recompra de Santillana y de un porcentaje que no poseían de Cadena Ser. La idea es potenciar las empresas rentables y sacarles el máximo rendimiento.
Es por ello que el martes 26 de febrero se aprobó la nueva ampliación de capital de 200 millones de euros con suscripción preferente para los actuales accionistas, para comprar del 25% que no controlan todavía de Santillana. la operación se cerró en 312 millones, 200 millones financiados por la ampliación y los otros 112 millones restantes financiados con la generación de caja de la anterior ampliación de capital.