Movistar y Mediaset -a través de su filial Supersport- han sido el proyecto elegido para gestionar Real Madrid TV para las próximas temporadas. La oferta conjunta de los dos grupos audiovisuales fue la mejor valorada por el club blanco y superó a la presentada por Mediapro, gestor del canal desde 2001 a través de Royal Media Internacional.
Este cambio de tercio refuerza la apuesta de Movistar y Mediaset por la producción propia y su proyecto espera dar un nuevo aire al canal de televisión del Real Madrid, estancado en el 0,3% de audiencia según los datos de Kantarmedia de marzo. La adjudicación del concurso ha sido comunicada a las partes este mismo martes.
El nuevo acuerdo que se suscribirá con Movistar y Mediaset incluye toda la producción técnica del canal, dejando en el club la decisión sobre programas y el diseño de la parrilla. El canal fue lanzado el 15 de febrero de 1999 bajo la producción de Sogecable y desde 2001 es realizado por Mediapro, grupo con el que dio el salto a la TDT.
La producción comienza el 1 de julio
El canal nació para el pago, primero en Canal+ y luego en el resto de plataformas, para dar el salto a la TDT en abierto gracias a las concesiones que otorgó el gobierno de Mariano Rajoy en 2015. Desde hace casi cuatro años emite en abierto con discretos resultados de audiencia.
Movistar y Mediaset asumirán la producción del canal oficialmente desde el 1 de julio, es decir al finalizar la temporada en curso, momento hasta el cual la gestión seguirá siendo de Mediapro. La estructura directiva de Real Madrid TV no debería verse afectada con el cambio de proveedor técnico.
Números del contrato
Respecto de las cifras del contrato, estamos hablando de un montante que ronda los 15 millones de euros anuales. En relación a sus ingresos por publicidad, Real Madrid TV facturó 1,9 millones de euros por publicidad en 2018, frente al millón que registró en 2017, según datos de Infoadex.
Según informó Vozpópuli, Florentino Pérez inició hace unos meses conversaciones con varias empresas del sector audiovisual para tratar de reducir el gasto del Real Madrid en su canal de televisión, con la perspectiva de que este año vencía su contrato de Mediapro. Esto implica que la oferta presentada por Movistar y Mediaset ha estado por debajo que lo que hasta ahora se pagaba a Mediapro.