La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha complicado las vacaciones de los directivos de Mediaset. En pleno agosto y con media España preparando las vacaciones, el regulador ha cursado hasta multas en menos de una semana al grupo audiovisual y lo ha hecho por un valor total de un millón de euros.
Unas sanciones que se refieren principalmente a prácticas publicitarias prohibidas, como vulnerar el tiempo máximo establecido para dedicar a autopromociones y mensajes publicitarios de televenta; emplazamiento de producto; y emisión de publicidad encubierta.
En la primera de ellas, cursada el 2 de agosto, se sancionó a Mediaset por superar el tiempo dedicado a la autopromoción. 365.301 euros por la vulneración de los artículos 13.2 y 14.1 de la Ley General de Comunicación Audiovisual (LGCA), que regulan el tiempo máximo de emisión dedicado a la autopromoción, los mensajes publicitarios y a la televenta.
Las infracciones detectadas en Cuatro, Energy, Divinity y Telecinco tuvieron lugar en los meses de diciembre de 2018 y enero y febrero de 2019. La CNMC establece que para que las sobreimpresiones informativas sobre la programación del prestador del servicio de comunicación audiovisual sean excluidas del cómputo de tiempo para la emisión de mensajes publicitarios, solamente deben contener el nombre del programa, el día y la hora de emisión.
Emplazamiento de producto
La segunda multa llegó el 6 de agosto por emplazamiento de producto en los programas Vive la Vida de Telecinco y First Dates: San Valentín en Cuatro. 277.890 euros, por vulnerar lo dispuesto en el artículo 17.2 y 3 de la Ley General de Comunicación Audiovisual (LGCA) que están tipificadas como infracciones administrativas graves.
Finalmente, este 8 de agosto se anunció la sanción por emisión de publicidad encubierta en el programa Sálvame, en Telecinco, y en un capítulo de la serie La que se avecina, en el canal FDF. La LGCA señala en su artículo 18.2 que está “prohibida la comunicación comercial encubierta y la que utilice técnicas subliminales”
Unas multas que no hacen más que empeorar la relación de Mediaset y su consejero delegado Paolo Vasile con la CNMC y su presidente José María Marín Quemada. El editor de Telecinco y Cuatro ha cargado en más de una ocasión contra el regulador por el “acoso”, que a su juicio somete a los dos grandes grupos audiovisuales.
En la última junta de accionistas de abril, Vasile calificó a la CNMC del "verdadero problema" del sector y de "árbitro asimétrico" al culparle de realizar una fiscalización con excesiva vigilancia sobre la televisión tradicional frente a la escasa regulación frente a las nuevas plataformas como Netflix, HBO, Amazon o Youtube.
Expediente de la CNMC
"El verdadero problema, en éste y en otros tantos sectores industriales, el verdadero enemigo puede ser el árbitro. Cuando no está sereno, cuando no es objetivo, cuando no ha entendido o no quiere entender, o finge no haber entendido, en qué consiste el partido de hoy, un partido que tiene reglas y límites completamente diferentes del de ayer", dijo Vasile tirando de ironía.
Mediaset y Atresmedia están siendo investigados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) acusados de colusión publicitaria, un expediente que debería fallarse en las próximas semanas. Y por el que se expone a una multa que podría rondar los 50 millones de euros.
En relación a esta multa y el rechazo a un acuerdo amistoso por parte del regulador en este expediente Vasile también se despachaba a gusto semanas después. En un duro comunicado, la cadena de Paolo Vasile carga duramente contra el presidente de la CNMC, José María Marín Quemada acusándole de “animadversión personal”.
En su nota, la cadena dirigida por Paolo Vasile elabora un relato en el que culpa a Quemada de una persecución que, a su juicio, existe desde el año 2015, señalando las ocasiones en las que Quemada ha demostrado que la resolución "parece ya decidida antes de tiempo". Una guerra que continúa con estas tres resoluciones en menos de una semana.