Desde que las nuevas tecnologías llegaron a la sociedad, no han cesado de producir cambios en la rutina diaria de los ciudadanos, mejorando, en muchos casos, la manera en que ciertas cosas se hacían. De esta revolución no se salva el tiempo de ocio, en el que los avances están penetrando de una forma particular.
Así, con el desarrollo de los dispositivos móviles y de las tablets, el consumo de contenido audiovisual ha pasado de realizarse en las televisiones, ordenadores y radios a ser consumido a través de estos artilugios, con las aplicaciones de las emisoras, los medios de comunicación, redes sociales...
Del mismo modo, si antes había que conformarse con lo que las cadenas de televisión emitían, ahora se ha evolucionado hasta alcanzar un verdadero 'boom' en el consumo de contenido audiovisual a la carta, con plataformas como Netflix, HBO o Amazon Prime que permiten disfrutar de cientos de series y películas con solo un clic.
Pero no sólo se consumen así este tipo de formatos, sino que el ámbito del sonido también ofrece la misma oportunidad: aplicaciones como Spotify, Apple Music, Amazon Music o Soundcloud poseen una amplia biblioteca de canciones. Dentro de este sector, hay un producto que está creciendo de forma acelerada: el podcast.
Origen y crecimiento inicial
Este formato nace en Estados Unidos, y muy centrado en este país. Lo hace ligado a la marca Apple (de ahí el nombre de podcast, que viene del reproductor iPod y de broadcast, emitir en inglés).
En el país norteamericano se expandió de manera rápida, dado el gran mercado que posee la empresa creada por Steve Jobs en el territorio estadounidense, desde donde el podcast alcanzó a otras naciones anglohablantes.
Ángel Jiménez, cofundador y CEO de la plataforma de difusión de podcasts en español Cuonda, explica que, en Estados Unidos, el mercado del podcast “está muy maduro”. En primer lugar, por ser el lugar en que se originó, y esto suele favorecer la penetración de un producto.
Otra de las razones de ese rápido desarrollo es que los estadounidenses emplean mucho tiempo en sus desplazamientos rutinarios, para lo que este formato es ideal: contenido a la carta consumido de una forma que les permite disfrutarlo incluso mientras conducen.
El desarrollo también se vio favorecido a esa propagación del formato y de los contenidos producidos en EEUU a otros países anglohablantes y a su penetración en ellos. Un público mayor demandaba este producto, lo que aceleró su proceso de crecimiento.
"En España, el término podcast llegó de la mano de José Antonio Gelado, en torno al año 2006", explica Pilar Martínez Costa, Doctora en Comunicación Pública por la Universidad de Navarra y docente especializada en comunicación radiofónica.
Sin embargo, como ella explica, no es hasta la aparición de Cuonda, sobre el año 2015, cuando este formato toma fuerza en el territorio español, y los potenciales productores y consumidores empiezan a fijarse en él.
Un año más tarde, el grupo Prisa creó Pódium Podcast, otra de las plataformas relevantes dentro del mercado español. “Al principio, no disfrutó de mucha visualización dentro de sus propios medios, pero ahora sí que existe una mayor sinergia”, señala Martínez Costa.
Así, en este grupo comenzaron a aprovechar contenido relevante del que disponían para sus podcasts, como entrevistas relevantes previamente grabadas, entre otros.
El podcast continúa en su proceso de crecimiento en España, aunque su posición ya es destacada. El retraso respecto a Estados Unidos viene, en primer lugar, por su origen: cuando apareció este formato, el mercado de Apple en el territorio español no era muy notable. Con la llegada de los smartphones se pudo acceder a este tipo de contenidos.
Asimismo, al contrario de lo que ocurrió en el mercado anglohablante, donde las producciones estadounidenses eran consumidas en otras naciones del mismo idioma, los contenidos que tenían éxito entre los españoles y eran producidos aquí no gozaban del mismo impacto en los países de Latinoamérica.
"Se pensaba que por compartir idioma se iba a triunfar, pero no fue así. Es una cuestión de los podcasts, porque los locutores hablan de su propia experiencia, y existe una diferencia cultural entre España y estos países", comenta Jiménez.
Grandes inversiones
El podcast se encuentra ahora en un momento dulce, en el que las grandes empresas están comenzando a ver todo su potencial. Medios de comunicación, especialmente emisoras de radio, y empresas del sector musical, como la ya mencionada Spotify, están apostando por este formato como vía de negocio.
En concreto, la multinacional de origen sueco, una de las principales empresas dentro del ámbito del streaming musical, ha anunciado que invertirá más de 300 millones en adquisiciones relacionadas con el podcast.
Dentro de este amplio plan de inversión, destacan las compras ya ejecutadas de Gimlet Media, una productora de contenido en formato audio, y de Anchor, una aplicación que permite a sus usuarios grabar y difundir podcasts.
Los medios de comunicación también están decididos a aprovechar el potencial de este formato. En especial, las emisoras de radio, que "saben trabajar, producir este tipo de contenidos y tienen muchos contenidos de calidad ya hechos que pueden relanzarse", como apunta Martínez Costa.
De hecho, como señala Ángel Jiménez, algunos de los contenidos más consumidos por los usuarios de este mercado son los programas de radio o fragmentos de ellos, que las cadenas ofrecen a sus oyentes en formato podcast tras su emisión en antena.
Un éxito justificado
Las razones que han impulsado al podcast hacia el éxito que está cosechando son varias. Tanto Ángel Jiménez como Pilar Martínez Costa coinciden en que la primera de ellas es que se trata de la respuesta a una demanda.
"Las nuevas generaciones tienen menor apego a la radio, pero quieren consumir contenido en formato audio, y el podcast es la solución a esta necesidad", explica el CEO de Cuonda.
Para Ángel Jiménez, este fenómeno está relacionado además con “un tema de descubrir un nuevo formato, menos conocido”. Esa novedad le está permitiendo al podcast crecer a gran escala en el mercado español, donde los estudios apuntan a que el 40% de los internautas los consumen con frecuencia.
Lo asequible y cómodo que resulta consumirlo es otra de las razones del éxito del podcast. Hoy en día, pocas personas no disponen de un smartphone con conexión a internet, herramienta suficiente para acceder y disfrutar de este tipo de contenidos.
Además, de la radio ha heredado la posibilidad de reproducirse mientras se desarrollan otras actividades, e incluso tiene un punto extra a favor. "No hay que sintonizar nada, sino que tú te suscribes y los contenidos se van reproduciendo sin tener que buscar la emisora. Es un acceso más sencillo", apunta Martínez Costa.
También es sencillo producirlos. Basta con poseer un dispositivo para grabar audio, como puede ser el propio teléfono móvil, y un tema sobre el que hablar. Incluso hacerlo de forma profesional es más económico que producir contenidos en otros formatos.
Dada su sencillez, abunda el contenido producido a nivel amateur, con aplicaciones que permiten su grabación, edición y difusión. Una de ellas es la citada Anchor, con que sus usuarios dispondrán de las herramientas necesarias para crear su podcast, la capacidad de compartirlo en las principales plataformas y acceder a detalladas estadísticas.
El contenido de nicho se ha potenciado de manera destacada con la aparición del formato podcast. Su producción asequible a varios niveles permite tocar temáticas más concretas, que afecten o gusten a una comunidad más reducida, y obtener beneficios con este tipo de productos.
Pisa fuerte y se mantiene
Conociendo todas estas características del podcast, surge una pregunta en función a su destacado crecimiento: ¿se trata de una 'burbuja' o realmente llega para quedarse? Los expertos contactados por EL ESPAÑOL coinciden: el podcast está aquí para quedarse.
"Va a ayudar a transformar la radio, igual que YouTube ayudó a hacerlo con la televisión", afirma Jiménez. Algo parecido opina Martínez Costa, quien se apoya en diversos estudios para declarar que "la radio y el podcast son complementarios, y el podcast sirve para traer gente a la radio".
Lo que también tiene claro la profesora de la Universidad de Navarra es que el crecimiento del podcast no será siempre al ritmo actual. "Seguirá incrementando su penetración, pero lo hará ya sin cambios bruscos, sino paulatinamente", augura.
"La opción de acceder a contenido de audio bajo demanda, al igual que en Netflix con el contenido audiovisual, es algo muy interesante para los consumidores, que encontrarán una amplia gama de productos", señala Ángel Jiménez como motivo de ese afianzamiento.
La mayor profesionalización del producto es otro de los puntos que señala Martínez Costa, que cree que "no todos los productores de podcast actuales se mantendrán", señalando como más afectados a aquellos que lo hacen de manera más amateur.
En definitiva, le augura un futuro prometedor, en el que creerá de una forma estable, pero en el que el volumen de contenidos se reducirá por la desaparición de estos productores. En cambio, los grandes productores harán apuestas concretas en temática y formato, logrando una presumible mayor calidad.