Ángel Faus Belau ha muerto en Castellón el domingo 30 de agosto de 2020 a los 84 años. Había sido operado hace unos días de problemas estomacales y no ha podido superar el postoperatorio. Con él se ha ido una parte de la radio española, un profesor que supo transmitir su pasión por la radio a centenares de alumnos de 25 promociones de la Universidad de Navarra, un investigador que quemó su vida en dar a la radio en España una fundamentación y una armonía científica.

Había nacido en Villareal. Le gustaba enseñar esa ciudad con mimo, recorrer la historia y los lugares que pasan inadvertidos a un visitante rápido y convencional. Vibraba de un modo particular con todo lo valenciano. Era genéticamente entusiasta, aunque a la hora de enseñar, investigar o trabajar siempre lo hacía al modo alemán.

Casi cinco años de su vida estuvo formándose en Francia y Alemania. Fue en Alemania donde su inicial pasión por la radio se fortaleció de la mano de tres profesores eminentes, Dovifat, Groth y Roegele, que le dieron la plomada del trabajo bien hecho y acabado. Meses alemanes en que recién casado y en compañía de María Luisa, su mujer, solía recordar como años duros -por el hambre y las privaciones que pasaron- y años alegres, pendientes de ir a la ópera, que financiaban quitándose la comida de la boca.

Al terminar los estudios de periodismo en la Universidad de Navarra, Ángel Faus e Iñaki Gabilondo se hicieron cargo de la enseñanza de radio y televisión. En 1965, Ángel Faus dirigió la construcción y puesta en funcionamiento del primer estudio de radio que se creaba en una universidad española, el segundo en Europa, después del de Berlín de 1935.

No quiso nunca tener un horario de trabajo. Se podría decir que no quiso hacer nada más en su vida que trabajar, con frecuencia hasta altas horas de la noche. Vivió para la radio, todo el trabajo siempre le pareció poco para la radio, le faltaron horas, días y semanas para tratar de conocer a un medio que siempre denominó como "desconocido". Con la tesis La tecnología de la Información, alcanzó una meta única y exclusiva: ser el primer doctor en Ciencias de la Información que alcanzó ese grado académico en España.

Tenía una voz radiofónica, redonda, sonora, grave, lo que le ayudaba a robustecer aún más su autoridad moral. Y también una buena planta. Alumnos, empleados y profesores tienen en sus retinas la imagen de Ángel Faus como maestro de ceremonias de las aperturas de curso, doctorados honoris causa o celebraciones académicas de la Universidad de Navarra. En su casa de Las Playetes, en Benicassim, donde se instaló a trabajar después de la jubilación, conservaba una réplica del bastón de mando con el que marcaba los tiempos y el ritmo de las ceremonias universitarias y que la universidad le regaló al tiempo de su jubilación.

Fue un profesor invitado en numerosas universidades, en Alemania, Austria, México, Chile, Argentina y consultor de radio con el Innovation Media Consulting Group.

Escribió más de 300 artículos sobre radio y televisión. Entre sus numerosos libros, me parece oportuno señalar dos especialmente relevantes. En 1974 publicó La radio: introducción al estudio de un medio desconocido, el primer manual completo de radio que se publicaba en España. En 2007, apareció La radio en España (1896-1977). Una historia documental, obra monumental de una fuerte densidad investigadora, respaldada por más de 8.000 documentos, seleccionados de entre unos 37.000 obtenidos de archivos históricos españoles. Una de las conclusiones más llamativa de este extenso trabajo es su afirmación -que prueba documentalmente- de que el inventor de la radio no fue el físico italiano Marconi, sino el ingeniero español Julio Cervera Baviera.

Ángel Faus fue Premio Internacional de Teatro Radiofónico Margarita Xirgú de 1992, convocado por RNE-Radio Exterior y el Instituto de Cooperación Iberoamericana.

Ha muerto trabajando en la continuación de su historia documental del libro de 2007, llevándola desde 1977 hasta nuestros días.

Gracias, Ángel, por haber hecho más conocida la radio. Descansa en paz.

*** Carlos Soria fue Decano de la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad de Navarra entre 1975 y 1984.