En pleno asalto del Gobierno a Radio Televisión Española (RTVE), el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha elevado la partida presupuestaria destinada a la corporación en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2023. En concreto, destinará 530 millones de euros. Se trata de la cifra más alta desde la de 2011, cuando el presupuesto ascendió a 548 millones.
Se trata de una cifra superior a los 445 millones del ejercicio anterior (+19%). Además, este dato supera en 85 millones la partida del año pasado y es muy superior también al de 2019, cuando el montante destinado por el Gobierno para CRTVE fue de 376 millones de euros.
En cuanto a ingresos, de estos 530 millones se consideran 490 millones de aportación estatal, es decir, un 10% más que el año anterior (cuando fue de 443 millones). El montante restante se consignan mediante programas de fondos europeos.
Por otro lado, al cierre del ejercicio 2023, los PGE consignan un endeudamiento de 691 millones de euros. Cifra que también supera a la previsión que se dio para 2022 (588 millones de euros).
En este sentido, el endeudamiento no ha dejado de crecer año tras año desde que en 2010 el Gobierno presidido por José Luis Rodríguez Zapatero incluyese la deuda histórica de RTVE en deuda pública y crease la nueva CRTVE.
Cambios en RTVE
Este aumento presupuestario en RTVE coincide con unas semanas convulsas en la corporación ha cambiado de presidente.
Hace una semana, Elena Sánchez, que fue elegida por el consejo de administración extraordinario tras la dimisión forzada de José Manuel Pérez Tornero. Dicha renuncia al puesto vino motivada por las bajas audiencias de la televisión y la radio, pero también por la presión a la que los consejeros del PSOE y de Unidas Podemos ejercían sobre la línea editorial de la corporación.
El siguiente capítulo se escribió este martes, cuando el Consejo de Ministros aprobó una modificación de los estatutos sociales de la Corporación a instancias de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi). El cambio busca dar plenos poderes a la nueva presidenta.
Así, Elena Sánchez tendrá las manos libres para dirigir RTVE aunque su nombramiento no haya recibido el apoyo del Congreso de los Diputados. El objetivo es evitar las limitaciones que fijaban los estatutos de RTVE a un presidente cuyo mandato no hubiera sido refrendado por la Cámara Baja.
Cambios, enmarcados todos ellos, con la vista puesta en las elecciones de dentro de 15 meses.