Cuando los accionistas de los bancos españoles vieron anoche el informe de la Autoridad Bancaria Europea (EBA) se echaron las manos a la cabeza. ¿Cómo podía ser que la situación de capital de máximo nivel, conocido como CET1 fully loaded de los bancos españoles fuese la peor de Europa?
Después de todos los esfuerzos de las entidades para aumentar sus niveles de capital, todos los títulos emitidos con capacidad de absorción de pérdidas, toda la presión de España para que fuesen aceptados los DTA (créditos fiscales diferidos)… para acabar con los bancos del país en la peor posición por capitalización de la Unión Europea (excluidas las entidades de Bulgaria, Croacia, Estonia, Grecia, Lituania, Rumanía y Eslovaquia e incluyendo a Noruega). Según los datos de la EBA, el nivel de capital fully loaded de las entidades españolas se situaba al cierre de junio en el 9%, lejos de la media europea que alcanzaba el 11,8%.
Cuando los inversores conocieron el informe, los mercados ya habían cerrado, por lo que tuvieron que esperar hasta la mañana del miércoles para ejecutar sus órdenes de venta. La sangría en bolsa para los bancos españoles comenzó a primera hora de la mañana. Popular, el más afectado, llegó a caer un 6,35% en los primeros minutos de cotización; el Santander, un 4,62%; el Sabadell, un 4,28% y CaixaBank, un 4,09%.
El cálculo está mal hecho
Los datos parecía que no se ajustaban a la realidad del sector y el Banco de España lo ha confirmado de urgencia: “Se ha detectado un error técnico en los datos del ejercicio de transparencia para 2015 publicado ayer por la Autoridad Bancaria Europea (EBA), debido a la doble contabilización de las deducciones del capital AT1”, ha indicado el regulador en una nota de prensa.
Este error de la EBA lleva a “minusvalorar de forma significativa” el nivel de capital de los bancos de algunos países, incluido España, indica el Banco de España. “Esta minusvaloración también repercute de modo apreciable en los datos agregados de la banca española que aparecen en el informe del citado ejercicio”, añade.
La Autoridad Bancaria Europea está revisando los cálculos que ha realizado y actualizará su informe lo antes posible. Mientras tanto, los bancos españoles reducen sus pérdidas en bolsa, pero todavía siguen muy castigados a la espera de conocer los datos correctos, con descensos que superan el 2%.