Los bancos centrales de Europa y China salen al rescate de los mercados: el Ibex rebotó un 3,3%
Como siempre, han tenido que ser los 'señores del dinero' quienes saliesen a devolver la esperanza a los inversores
15 febrero, 2016 13:43Noticias relacionadas
Quién iba a decir que la vuelta de China después de una semana con su bolsa cerrada iba a marcar el inicio del rebote de los mercados. Pero la señal de fortaleza que ha querido enviar hoy el Banco Popular de China (PBoC) ha conseguido calmar los ánimos. La autoridad monetaria estableció esta madrugada la mayor subida del yuan contra el dólar en más de una década, con una apreciación del 1,25%. La divisa china no flota libremente en el mercado, sino que es el banco central quien fija un tipo de cambio central contra el dólar y, a partir de ahí, permiten una fluctuación del 2%.
El gobernador del PBoC, Zhou Xiaochuan, explicó en un entrevista en la revista Caixin que la situación de la balanza de pagos del país es buena, la salida de capitales es normal y el tipo de cambio contra una cesta de divisas es estable. Los inversores han entendido que la autoridad monetaria no tiene previsto devaluar más el yuan. Precisamente esta depreciación del yuan en el inicio del año fue una de las principales causas del desplome de los mercados internacionales.
El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, tomó el testigo de Xiaochuan para estimular a los mercados. 'Super Mario' volvió a insistir en que la entidad "está preparada para actuar" en la reunión de marzo. En otras palabras, que los inversores esperen nuevos estímulos.
Introductory statement by Mario Draghi for hearing at European Parliament's Economic and Monetary Affairs Committee https://t.co/ByuG9BSn9h
— ECB (@ecb) febrero 15, 2016
Las bolsas, estimuladas
La actuación encadenada de los bancos centrales de China y Europa empujó a las bolsas europeas, que rebotaron con fuerza en el inicio de la semana después de unos días complicados. El Ibex ha cerrado la sesión con un avance del 3,3% después de sufrir su peor semana desde junio de 2012, justo antes de que España se viera obligada a solicitar el rescate financiero. De este modo, el selectivo ha subido hoy 260 puntos, hasta los 8.179 puntos.
El avance del Ibex ha estado en línea con el resto de Europa. El EuroStoxx 50 y el Cac 40 de Francia han avanzado un 3%, el Ftse Mib italiano ha subido un 4% y el Dax alemán ha rebotado un 2,7%.
El rebote ha estado liderado por dos de las compañías más castigadas de las últimas semanas: Acerinox y ArcelorMittal, con avances que superarib el 5%. La señal de fortaleza que ha intentado lanzar hoy China beneficia especialmente al precio del acero.
También es un buen día para el sector financiero español, que ha subido casi un 4% en la sesión. Popular y Sabadell han encabezado la remontada, con subidas de en torno a un 5%, mientras que BBVA ha sido la entidad más rezagada, con un avance del 3%.
La prima de riesgo empezó la sesión con una caída de 5 puntos básicos, hasta los 142 puntos, sin embargo, al cierre de la sesión se fue moderando hasta acabar la sesión en 147 puntos, el mismo nivel en el que cerró el viernes. La rentablidad que exige el mercado al bono español con vencimiento a 10 años cerró la sesión en el 1,7%.
Las contradicciones de Japón
Esta madrugada el índice Nikkei de la Bolsa de Tokio se ha disparado un 7,16%. Esta es la mayor subida del selectivo desde septiembre y su cuarta mejor sesión desde el inicio de la crisis. Y eso que el país ha publicado un dato muy malo de su PIB del último trimestre del año. Su economía se contrajo un 0,4% trimestral y un 1,4% interanual, peor de lo que esperaban los expertos. Por si fuese poco, el principal motor de la economía nipona, el consumo interno, cayó un 0,8% trimestral y un 3,3% interanual.
Cifras que reflejan que los esfuerzos del Abenomics están fracasando a la hora de reactivar el dinamismo de la economía del país. Entonces, ¿por qué se dispara la Bolsa de Tokio? Porque los inversores creen que estos datos tan malos empujarán al Banco de Japón a aprobar más estímulos en los próximos meses. Dopaje monetario para los mercados.