La agencia de calificación de riesgo Fitch ha vuelto a bajar la nota de la constructora Isolux otro escalón más, desde 'C' hasta 'RD' (default selectivo), que indica que la compañía ha impagado alguno de los bonos o instrumentos de deuda, pero no ha presentado concurso de acreedores. Es el segundo rating más bajo que puede otorgar, por encima sólo de D (default), que implica suspensión de pagos.

La agencia baja la nota de la compañía de ingeniería y construcción a pesar de que el grupo logró la pasada semana adhesiones suficientes de sus acreedores para aprobar su plan de rescate de 2.000 millones de euros, con el que prevé reestructurar su deuda y garantizar su solvencia. Pese a la refinanciación, la agencia considera que no es una buena noticia para el futuro de Isolux.

Se trata de la tercera rebaja de calificación que Fitch realiza a la deuda de Isolux en los últimos tres meses, desde que la compañía evidenció sus problemas de liquidez. La firma atribuye su actual rebaja a su consideración de que Isolux puede incurrir en impagos en el marco de su proceso de reestructuración de deuda.

En este sentido, en su informe sobre la compañía, señala que la empresa que actualmente preside Nemesio Fernández-Cuesta ha puesto en marcha mecanismos judiciales para protegerse del supuesto de que un acreedor solicite su suspensión de pagos. En España, Isolux solicitó el pasado día 29 de julio homologación judicial para extender el acuerdo alcanzado con el grueso de sus acreedores a todos ellos.