Todos los expertos relacionados con el bitcoin saben bien que la gran revolución de Satoshi Nakamoto fue el blockchain (cadena de bloques). Sobre esta tecnología se construyó la moneda digital que ha demostrado resistir a todos los ciberataques (no hay que confundirlo con los ataques que sufrieron algunas entidades de custodia de bitcoins o las quiebras de estas entidades, como el sonado caso de la japonesa MT.Gox).
Era sólo cuestión de tiempo que las entidades financieras aprovecharan esta tecnología para incorporarlo a sus sistemas, ya que permite ejecutar pagos y liquidaciones entre los distintos bancos de forma más rápida y segura. Cuatro grandes entidades han anunciado hoy el nacimiento de este proyecto. Santander, UBS, Deutsche Bank y BNY Mellon se han aliado para lanzar su propia divisa digital utilizando esta tecnología de la cadena de bloques, la USC (Utility Settlement Coin). Su objetivo es fomentar la investigación y el desarrollo de la tecnología blockchain y potenciar su uso entre las entidades y los bancos centrales. Y, de paso, ahorrar costes, ya que esta es una de las grandes ventajas de la cadena de bloques.
"Un USC sería una moneda que existe en un registro contable distribuido, es decir, en un blockchain", explica el Banco Santander, "de esta manera, un USC es convertible en paridad con un depósito en su correspondiente divisa, es decir, que se puede intercambiar entre entidades, y gastar un USC es como si gastáramos el dinero equivalente en el mundo real".
“Conversaciones recientes de los bancos centrales y los reguladores sobre divisas digitales confirman el enorme potencial que tienen”, explica Julio Faura, responsable de Investigación y Desarrollo de blockchain de Santander. En su opinión, “el USC es un paso clave hacia el mercado financiero futuro con tecnologías de registro contable distribuido”.
Las cuatro entidades no están solas en este proyecto, ya que también colabora el operador de mercados ICAP y la startup Clearmatics. Precisamente Celarmatics está en el germen de este proyecto, que empezó en septiembre de 2015 junto con UBS cuando lanzaron el concepto del USC. Todas ellas están en contacto con los reguladores para asegurar el buen funcionamiento del sistema y cumple todos los requisitos regulatorios. “El USC tiene ya planes para hacer pruebas en el mercado”, explica el Santander en una nota de prensa.
El futuro ya está aquí
El interés de Santander (también de BBVA) por ganar peso en blockchain no es es nuevo. “En Bitcoin no estamos interesados. En blockchain, sí”, aseguraba esta primavera, Carlos Kuchkovsky, responsable de la plataforma Kickstart de BBVA. “Es el sueño de cualquier supervisor: poder ir a un sitio, mirar todas las nuevas operaciones de forma transparente y centralizada”, añadía.
El blockchain, como se denomina a las operaciones en bloque, permiten transacciones digitales en bloque entre dos puntos y puede ser una revolución para la banca. ¿Por qué? Porque elimina la necesidad de tener intermediarios en la compraventa de activos financieros. Simplemente, la banca se ahorra pasos.
BBVA y Santander mostraron, sin reservas, su interés por el blockchain en las jornadas Revolution Banking 2016 organizadas en Madrid, este mes de mayo, por iiR España. Y la entidad presidida por Ana Botín no pudo ser más clara respecto a cuáles eran sus intenciones. “En Santander tenemos una aproximación de dos tipos. Primero, estamos viendo a nivel interno cómo esta tecnología puede sustituir o mejorar el negocio actual. En un segundo nivel, en el plano internacional, estamos participando en distintos foros y consorcios”, adelantó en ese foro Roberto García, responsable de pagos digitales y blockchain del banco.