Estos resultados podrían provocar que Dijsselbloem pierda su cargo como ministro de Finanzas en Países Bajos y siembra dudas sobre su continuidad al frente del Eurogrupo, lo que abre la puerta a otros candidatos como el ministro de Economía, Luis de Guindos, que ya optó al puesto en la última elección.
El protocolo del Eurogrupo establece que los ministros de los países cuya moneda es el euro elegirán un presidente para un periodo de dos años y medio, pero no aclaran si éste debe ser también ministro en uno de los gobiernos.
No obstante, un alto funcionario explicó que las reglas recogidas en un documento de trabajo que no es público son "claras". Según afirmó esta fuente, "el presidente del Eurogrupo tiene que ser el ministro de Finanzas" de uno de los países del euro, pero recordó que en Países Bajos suele tomar bastante tiempo la formación de Gobierno y durante ese periodo Dijsselbloem seguirá siendo ministro, aunque en funciones.
Por lo tanto, sería necesario nombrar otro presidente para esta formación de ministros del euro si Dijsselbloem no ocupa un ministerio relacionado con la economía en un futuro gobierno de coalición holandés.
Este escenario vuelve a poner a De Guindos entre las posibilidades para ocupar la presidencia del Eurogrupo, aunque el ministro evitó "especular" y no aclaró si planeaba volver a optar a este puesto cuando se le preguntó sobre el asunto en enero de este año.
Si finalmente el titular de Economía español se lanzase a la carrera por presidir el Eurogrupo, se enfrentaría al obstáculo añadido que representa el actual desequilibrio entre familias políticas al frente de las instituciones europeas.
En la actualidad, las tres están copadas por el Partido Popular Europeo (PPE) tras la elección de Antonio Tajani como presidente de la Eurocámara y la renovación del mandato de Tusk en el Consejo europeo. A estos dos se une el también popular Jean-Claude Juncker como presidente de la Comisión Europea.
Precisamente, cuando los jefes de Estado y de Gobierno de la UE eligieron al conservador polaco por otros dos años y medio se comprometieron a volver a finales de año "al proceso, criterios y equilibrios necesarios" en los puestos de alto nivel "para el próximo ciclo institucional".
Este enfoque podría beneficiar al ministro de Finanzas socialdemócrata de Eslovaquia, Peter Kazimir, quien en una red social declaró en enero que es "halagador" que haya sido considerado para un puesto "junto con nombres como Luis de Guindos".
En cualquier caso, todo depende del Gobierno de coalición que surja de las negociaciones entre los partidos holandeses, que estará liderado, salvo sorpresa, por Mark Rutte, líder del Partido Liberal (VVD), que cuenta con 33 de los 150 escaños del Parlamento.