En un documento adjunto a su informe 'Fiscal Monitor 2017', el director del departamento fiscal del FMI, Vitor Gaspar, --en colaboración con el subdirector del área, Luc Eyraud-- subraya que "los rescates bancarios y la profunda crisis económica" han provocado que la deuda pública de las economías avanzadas, que se situó en el 107,6% sobre el PIB en 2016, se encuentre en niveles "sin precedentes en tiempos de paz".
En este sentido, la institución presidida por Christine Lagarde advierte de que las finanzas públicas se encuentran expuestas a "grandes riesgos" que son "infravalorados con frecuencia", tal y como demostró la reciente crisis financiera global.
"Los gobiernos necesitan entender mejor los riesgos a los que se encuentran expuestos con el objetivo de adoptar estrategias para gestionarlos", afirman los principales responsables del departamento fiscal del FMI en su informe, donde, no obstante, reconocen que el "endeudamiento excesivo y los niveles récord de deuda pública" limitan los recursos financieros de los gobiernos.
Por ello, la institución con sede en Washington solicita en su informe fiscal correspondiente a 2017, titulado 'Conseguir más con menos', adoptar políticas fiscales "inteligentes, prudentes, contracíclicas y que favorezcan el crecimiento" con el objetivo de retornar a la senda de la consolidación fiscal en las economías avanzadas, interrumpida en 2016.
"La política fiscal tiene que desempeñar un papel más importante en la estabilización económica que en el pasado, porque los bancos centrales en muchas economías avanzadas han rebajado los tipos de interés a niveles próximos a cero y se están experimentando los límites de la política monetaria", insisten Gaspar y Eyraud.
"LA RENTA DEL 1% MÁS RICO CRECIÓ TRES VECES MÁS QUE LA DEL RESTO"
Asimismo, el FMI reclama políticas fiscales "más inclusivas" con el objetivo de reducir la desigualdad y denuncia que los ingresos del 1% más rico han experimentado un crecimiento anual "al menos tres veces mayor que el del resto de la población durante los últimas tres décadas".
"La política fiscal tiene un papel importante para asegurar que los beneficios del crecimiento se reparten más ampliamente entre la población", reza el informe fiscal del FMI, que indica que, en la mayoría de las economías avanzadas, la política fiscal ha sido cada vez "menos efectiva" en el desempeño de este papel durante los últimos veinte años.
"La reducción de la generosidad de los beneficios sociales, junto a una carga tributaria menos progresiva han reducido la capacidad de la política monetaria para estrechar la disparidad en los ingresos desde mediados de los años noventa", agrega el informe.
Además, el FMI advierte de que los "excesivos y crecientes" niveles de desigualdad e incertidumbre son "perjudiciales" para el bienestar y el crecimiento, por lo que propone mejorar la canalización de las ayudas a los hogares, instaurar un sistema fiscal más progresivo y mejorar el acceso al mercado laboral y a la sanidad pública en el marco de una serie de reformas estructurales.