Así lo ha explicado hoy en rueda de prensa el presidente de la Mutualidad, Enrique Sanz Fernández-Lomana, quien ha destacado que la entidad registraba un superávit de 30,4 millones de euros al finalizar el pasado ejercicio.
El volumen de las aportaciones ingresadas se elevó hasta los 598,4 millones de euros, frente a los 531,6 millones de 2015, una cantidad que la entidad espera que aumente el 5,01 % este año y alcance los 628,4 millones de euros.
De esta forma, el ahorro gestionado llegaría a los 6.666 millones a cierre de 2017, lo que representaría un incremento interanual del 12,20 %.
La entidad destinará íntegramente a reservas el excedente del pasado ejercicio, lo que reforzará su solvencia, que en 2016 superó en 2,25 veces los ratios mínimos exigidos por la normativa del sector asegurador Solvencia II, según la Mutualidad.
Los fondos propios alcanzarán, con esta aportación adicional, los 296,4 millones, un 11,42 % más que el año anterior.
Hay que destacar que la rentabilidad neta de las inversiones se situó en 2016 en el 5,62 % sobre los activos invertidos, lo que permite retribuir a los mutualistas con el 5,06 %, en tanto que para este ejercicio esperan un ligero recorte, que dejaría el rendimiento neto en el 5,55 % y el de los mutualistas, en el 5 %.
También creció en 2016 el número de mutualistas, hasta los 194.588 al final del ejercicio.
En cuanto al primer trimestre de 2017, el crecimiento de las aportaciones de los mutualistas fue de 176,9 millones de euros, un 16,48 % más que en el mismo periodo del ejercicio anterior.
El ahorro gestionado se situó en los 6.173,9 millones al cierre del primer trimestre del año en curso, un 13,51 % más, en tanto que los ingresos financieros netos sumaron 119,5 millones de euros tras crecer un 71,52 % respecto al mismo periodo de 2016.