Los productores de Castilla y León, la principal región productora de cereales de invierno - trigo, cebada, avena y centeno, que se recogen en junio - calculan cosechas entre un 50 y el 80 por ciento inferiores, mientras otras zonas productoras como Castilla-La Mancha, Extremadura o Cataluña también prevén importantes descensos.
Asaja dijo que las últimas precipitaciones, desiguales y de escaso volumen, no han paliado la situación, en un sector con apenas un 2 por ciento de las 5,7 millones de hectáreas de cultivo aseguradas en caso de sequía.
"El pronóstico meteorológico para las próximas tres semanas es de ausencia de precipitaciones significativas y temperaturas más altas de lo normal para estas fechas. Esta situación no contribuye a aliviar la situación sino que probablemente ésta se agrave aún mas hasta el comienzo de la cosecha", dijo en un comunicado.