De esta forma, la deuda de los estadounidenses ha crecido cerca de 500.000 millones de dólares en comparación al mismo periodo de un año antes, un avance con el que se coloca incluso a un nivel superior al registrado durante la crisis financiera de 2008, cuando se situó en 12,68 billones de dólares (11,38 billones de euros).
El estudio muestra también datos sobre la ratio de morosidad que se mantiene relativamente constante en el 3,4%. Sin embargo, los economistas autores del estudio mostraron su preocupación por el 11% de préstamos morosos a estudiantes.
En concreto, los préstamos a estudiantes se situaron hasta el 31 de marzo del actual ejercicio en 1,34 billones de dólares (1,20 billones de euros) y los préstamos para compra de automóviles en 1,17 billones de dólares (1,05 billones de euros).
No obstante, la deuda hipotecaria, que asciende a 8,63 billones de dólares (7,74 billones de euros) se sitúa por debajo de los niveles de endeudamiento en este tipo de préstamos en relación al periodo de crisis, cuando alcanzó los 9,99 billones de dólares (8,96 billones de euros), razón por la que uno de los autores del estudio señaló que "no es motivo de alarma".