Maite Nieva
Manuel Ortiz-Olave es jefe de Análisis de Monex Europe, la rama europea de Grupo Monex, compañía con más de 30 años de experiencia en la gestión de divisas. Es licenciado en Ciencias Económicas y Actuariales por la Universidad de Salamanca y máster en Finanzas y Dirección de Inversiones con Matrícula de Honor por la University of London. Ha recibido una beca del Instituto CFA de Londres, por los méritos académicos alcanzados en el campo financiero, habiendo aprobado desde entonces el primer nivel del Programa CFA. Actualmente trabaja en Londres. Colabora con numerosos medios españoles e internacionales, entre ellos Financial Times.
¿ ¿Qué expectativas tiene acerca del acuerdo alcanzado entre Arabia Saudí y Rusia para reducir la producción del petróleo?
¿ Los países de la OPEP se encuentran actualmente en una situación bastante delicada debido a las caídas de los precios del petróleo y están teniendo problemas para aceptar los precios del petróleo. Con este acuerdo intentan disminuir la producción petrolífera global y el exceso de oferta de inventarios de petróleo hacia niveles más acordes con la demanda actual y recuperar los precios. Sin embargo, la OPEP representa alrededor de un 30% de la cuota de mercado global, una cuota bastante reducida comparada con el pasado.
El elefante en la habitación ahora es el mercado de Estados Unidos. Desde la crisis del petróleo en 2014 el número de torres perforadoras en EEUU se ha disparado hasta las 885 torres activas, -máximos de agosto de 2015-, pero todavía muy por debajo de las 1900, antes del colapso de los precios del crudo en 2014 cuando el precio del petróleo estaba a 100-120 dólares el barril. La capacidad productiva de EE.UU es mucho mayor que la actual. Si la producción de crudo sigue aumentando en Estados Unidos, es muy probable que los precios del petróleo vuelvan a debilitarse en el medio-largo plazo.
¿ ¿Cuáles son los riesgos que plantea este escenario?
¿ Desde Monex pensamos que EE.UU. ha absorbido esa cuota de mercado a la que han renunciado los países de la OPEP. Las empresas petroleras de franking en EEUU llevaron a cabo inversiones de capital muy importantes en 2013-2014 y con la caída de los precios del petróleo detuvieron la producción pero, ahora vencen los cupones y los créditos y se enfrentan a un escenario en el que tienen que producir sí o sí, para hacer frente a las deudas, independiente de los precios. De lo contrario caerían en bancarrota o los resultados serían peores. Y, obviamente, está afectando a la oferta mundial.
¿ ¿Puede desencadenar una guerra del petróleo entre los países de la OPEP y EE UU ?
¿ Efectivamente estamos hablando una guerra sin precedentes entre los países de la OPEP y Estados Unidos. Es bastante improbable que volvamos a ver precios del barril por encima de los 80 dólares y los 90 o cien dólares, están prácticamente descartados. Lo más probables es ver nuevas caídas en los precios del petróleo. El último acuerdo parece más forzado que acordado. Tienen que hacer lo imposible para darle apoyo a los precios del petróleo y están enviando mensajes que están tergiversando los mercados. Una de las características de esteos acuerdos, tanto el de octubre del año pasado como este último es que están acordando congelaciones o disminuciones marginales de la producción de petróleo cuando los niveles de producción actuales de Arabia Saudí, o Rusia o cualquier país de la OPEP están en máximos históricos. Es contradictorio que lleguen a acuerdos en niveles cercanos en los máximos históricos. La época de los cien dólares el barril es algo que ha pasado ya a la historia.
¿ ¿Qué impacto van a tener los recortes en la producción en las divisas de las economías mundiales?
¿ Si comparamos el repunte de los precios del petróleo del último acuerdo con el de octubre del año pasado, este está siendo menos significativo. Probablemente los mercados se dan cuenta de que la OPEP tiene menos capacidad para afectar al precio como cártel de lo que un cártel debería tener. Desde los mínimos de hace una o dos semanas el precio del barril ha subido en torno al 12% mientras que cuando se anunció el último recorte a finales de noviembre subió un 26%. Los mercados nos envían un mensaje de que son más reticentes a creer lo que diga la OPEP.
En las divisas se ha visto un repunte en la corona noruega en el corto plazo; el dólar canadiense y en el rublo. Y, en menor medida, también se benefician el peso mexicano y el real brasileño. No obstante, una vez más, es un repute menos significativo que el de finales del año pasado. El dólar canadiense, que ha estado dominado por el precio del petróleo durante los últimos años, ha repuntado menos del 2%. El mensaje que trasmite es la falta de credibilidad de la OPEP.
¿ ¿Qué espera de dólar estadounidense?
¿ El dólar americano tiene su propia película. La tradicional relación materia prima-cereal-dólar americano no tiene sitio en el contexto actual. Actualmente reacciona en base a factores macroeconómicos que no son lo que se esperaba a principios de año. Ha habido un aumento en la euforia y optimismo económico quizá desmedido por la victoria de Trump y la mejora generalizada de ciertas condiciones económicas y, sin embargo, los índices de datos duros como empleo, inflación, crecimiento económico, ventas de automóviles, ventas minoristas, posteriores a estos índices guía no acaban de reflejar este aumento de la euforia.
¿ ¿La próxima subida de los tipos en junio por parte de la Fed se está cuestionando?
¿ Las probabilidades de un alza de tipos de la Fed están descontadas en un 93,8%. En este escenario, si no alzan los tipos será mucho más violento para los mercados que si subieran. Podríamos ver un alza de tipos blando si consideran que hay señales de ralentización y la inflación no va a continuar en la senda alcista, como se esperaba, para calmar a los mercados y retrasar la próxima revisión de tipos de septiembre a finales de año, como se está descontando ya.
Creemos que la Fed sigue a los mercados y no al contrario . Desde finales de 2015 ha prevenido a los mercados de una alza de tipos y cuando los mercados creían en ese alza de tipos y se reflejaba a través del aumento de los rendimientos de los activos de la renta fija de EE.UU, indicando esperaban dicha alza de tipos, la FED ejecutaban la subida y la reacción del mercado era prácticamente plana. Era un poco la pescadilla que se muerde la cola pero les ha funcionado muy bien en los últimos dos años.
¿ ¿Cuáles son las previsiones para la moneda europea?
¿ En el panorama del euro ha habido cuatro factores que han lastrado en los últimos trimestres y que ahora vuelven a revertir. Esos cuatro factores han sido las elecciones en Francia , las elecciones en Alemania, la crisis de deuda en Grecia y la crisis bancaria en Italia. Tras las elecciones en Francia, el posible auge de riego en la zona euro ha desaparecido y las encuestas en Alemania, están dando bastante credibilidad a la posibilidad de que Ángela Merkel vuelva a ser reelegida. Las consecuencias directas de una posible victoria de Merkel y la victoria de Macron sería la creación de una alianza franco alemana en el núcleo de la zona euro que le daría muchísima fuerza a la Unión Monetaria y ayudaría a solventar cualquier crisis en el futuro.
Por otro lado tenemos Grecia que ha registrado un superávit fiscal del 3,9%, increíblemente por encima del 0,5% que le exigían los acreedores del país. Esto le da alas ahora mismo a Grecia y podríamos descartar el problema griego de aquí en adelante . Y el elefante en la habitación, es Italia. No sirve de nada solucionar los otros problemas de la zona euro si Italia , al final colapsa , pero debido a que los otros tres factores de riesgo han desaparecido prácticamente y parece que son muy positivos para la zona euro, sería mucho más fácil solventar el problema de la crisis bancaria italiana. Teniendo en cuenta que los datos macroeconómicos de la zona euro en los últimos meses han sido excepcionales y que estos cuatro factores lastraban al euro, el BCE debería señalar un punto de inflexión en su política monetaria. Ahora está dando fuerza al euro y parece que de aquí en adelante podría continuar la senda alcista.
¿ ¿Vamos hacia la paridad euro/dólar?
¿ A principios de año descartaba la paridad, ahora me parece que está descartada a no ser que suceda algo inesperado. De hecho, espero un euro dólar en torno a 1,18-1,20 para finales de año. En las expectativas de una subida del euro respecto al dólar entra en juego la política de divergencia monetaria que ha dominado el euro dólar desde finales de 2014 cuando cayó del 1,36-a 1,05. Esa divergencia comienza a tener menos peso en el cruce de estas monedas, y debería continuar perdiendo peso. Desde que la Reserva Federal anunció el fin del QE hasta hoy ha lanzado tipos hasta el 1% y al mismo en BCE debería comenzar a señalar cambios en la política monetaria. Otro factores que el posicionamiento neto del euro vuelve a ser positivo por primera vez desde 2014.