S&P afirmó que las incertidumbres de corto plazo sobre la viabilidad política de Temer y un potencial proceso de transición prolongado resaltan los riesgos de un recorte en la calificación crediticia de Brasil.
La calificación a largo plazo de Brasil se mantiene en "BB", mientras que la nota a corto plazo en moneda local y extranjera sigue en "B".
La revisión especial negativa para la nota de Brasil refleja el riesgo de una rebaja crediticia en los próximos tres meses.
El Ministerio de Hacienda de Brasil aseguró que la decisión de S&P refleja el aumento de la incertidumbre relacionada a los eventos políticos recientes y reafirmó el compromiso para buscar la recuperación de la economía local a través de las reformas estructurales que buscan el equilibrio de las cuentas públicas.