De la Serna, que ha inaugurado una exposición de la Fundación Enaire, respondía así a la prensa después de que la negociación de los sindicatos de estibadores con la patronal Anesco entrara esta mañana en vía muerta y que los representantes de los trabajadores anunciaran que mantienen las tres jornadas de huelga para los días 5, 7 y 9 de junio.
"El ministerio ya hecho ya todo lo que tenía que hacer y creo que muchísimo más", ha añadido el ministro.
Ahora la responsabilidad está únicamente en que sindicatos, trabajadores y empresarios alcancen un acuerdo, ha subrayado al ser preguntado sobre si Fomento volverá a mediar en el conflicto.
En estos momentos "no tiene ningún sentido" que intervenga "otro agente u otro actor distinto a los que tienen que alcanzar ese acuerdo", ha añadido.
En opinión del ministro, no hay ningún otro sector productivo que haya tenido tantos estímulos para que un proceso de reestructuración y de adaptación se lleve a cabo con las garantías que se han dado.
Respecto a la huelga, ha manifestado que "cualquier huelga en los puertos supone un grave daño para la economía del país y un grave perjuicio", incluso para los propios trabajadores, pues "siempre está como espada de Damocles la posibilidad de que tráficos de mercancías que utilizan nuestros puertos se vayan a otros".
Además, ha dicho que en el caso de los puertos el problema es que, a diferencia de lo que ocurre en otros sectores, "las pérdidas se pueden prolongar bastante más allá del punto final del conflicto, y eso también preocupa al Gobierno".
En cuanto al dispositivo del ministerio para garantizar que la huelga no provoque problemas en los puertos, como podría ser la acumulación de camiones, ha dicho que tienen todo previsto para controlar que se cumplan los servicios mínimos, que es la principal obligación de su departamento.