"Lo más destacable es el respeto que infunde la sesión del próximo jueves, en la que tendrán lugar acontecimientos muy destacados (como) la reunión del BCE y (...) las elecciones británicas", dijo Daniel Pingarrón, analista de IG.
Otro de los puntos de interés el jueves será la comparecencia en el Congreso estadounidense del exdirector del FBI, uno de los asuntos que está generando incertidumbre política en Estados Unidos.
Además, el petróleo Brent seguía por debajo de los 50 dólares el barril por las tensiones entre los países del golfo Pérsico.
En este contexto, el Ibex-35 cerró con un descenso del 0,05 por ciento a 10.879,7 puntos, mientras el índice europeo FTSEurofirst 300 cayó un 0,64 por ciento.
Banco Popular, que se ha dejado alrededor de un 50 por ciento de su valor en la última semana en medio de la incertidumbre que rodea su futuro, volvió a ser el peor valor del Ibex-35, con una caída del 6,2 por ciento a 0,317 euros.
Toda la banca cerró a la baja. Santander y BBVA perdieron un 0,17 y 0,9 por ciento, respectivamente.
Repsol, que ignoró el descenso del precio del crudo, rebotó un 0,27 por ciento a 14,89 euros tras mejorar su precio objetivo Barclays a 20 euros y después de anunciar la víspera un gran descubrimiento de gas en Trinidad y Tobago.
El sector de las eléctricas también se escapó de las pérdidas, con Endesa avanzando un 1,3 por ciento, y Red Eléctrica e Iberdrola un 1,1 y un 0,79 por ciento, respectivamente, al beneficiarse del interés de los inversores por activos considerados más defensivos.
Entre otros grandes valores industriales, Telefónica subió un 0,48 por ciento e Inditex un 0,068 por ciento.
ArcelorMittal cedió un 2,5 por ciento tras recortar BAML su recomendación a "peor que mercado" por ver vientos en contra en los precios del acero.
El miércoles se celebra una reunión ordinaria del Comité Asesor Técnico (CAT) del Ibex-35, que probablemente no introducirá cambios en la composición del índice, según varios analistas, que apuntaron a Colonial como una candidata a futuro.