Las mutuas, que no tienen ánimo de lucro, gestionan cotizaciones sociales y, una vez cubiertas las reservas correspondientes y cerrada la gestión de cada ejercicio, retornan a los fondos de la Seguridad Social las cuantías correspondientes.
De los 644 millones de 2016, 528 millones van al Fondo de Contingencias Profesionales de la Seguridad Social, 2,38 millones a la conocida como hucha de las pensiones y 113,6 millones a la reserva complementaria de estabilización por cese de actividad de los trabajadores autónomos.
Antes de finalizar julio, las mutuas ingresarán el 80 % de ese excedente obtenido por la gestión de los accidentes de trabajo y enfermedades profesionales.
Con estas aportaciones, las mutuas suman 12.191 millones ingresados en estos fondos: 9.960 millones al Fondo de Contingencias Profesionales de la Seguridad Social, 1.487 millones al Fondo de Reserva (hucha de las pensiones) y 743 millones a esa reserva complementaria de estabilización por cese de actividad de los trabajadores autónomos.
En AMAT se agrupan las 20 Mutuas colaboradoras con la Seguridad Social que existen en España, a las que están asociadas 1,45 millones de empresas, y protegen a más de 14 millones de trabajadores.
Se trata de Activa Mutua, Asepeyo, Cesma, Egarsat, Fratenidad Muprespa, Fremap, Ibermutuamur, MAC, MAZ, MC Mutual, Mutua Balear, Mutua Gallega, Mutua Intercomarcal, Mutua Navarra, Mutua Montañesa, Mutua Universal, Mutualia, Solimat, Umivale y Unión de Mutuas.EFECOM
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