De este modo, España fue el cuarto país de la zona euro con mayor deuda en términos absolutos, solo por detrás de Italia (2,26 billones), Francia (2,20 billones) y Alemania (2,11 billones), aunque en relación al PIB ocupó el sexto lugar entre los 19 miembros de la eurozona, donde Grecia (176,2%), Italia (134,7%) y Portugal (130,3%) eran los países más endeudados.
La deuda pública española prácticamente se ha triplicado desde el estallido de la crisis, incrementándose un 189% respecto a los 390.638 millones registrados al cierre del segundo trimestre de 2008, cuando equivalía al 35,3% del PIB.
En el conjunto de la zona euro, la deuda pública alcanzó en el primer trimestre del año un récord de 9,69 billones de euros, un incremento trimestral de 107.766 millones, hasta representar el 89,5% del PIB de la región, frente al 89,2% de los tres meses anteriores.
Por su parte, la deuda pública del conjunto de la UE se situó en el primer trimestre en 12,51 billones de euros, el 84,1% del PIB, un incremento de 117.220 millones respecto a los tres meses anteriores.