Imaginemos que hace tres años usted estaba preocupado por el devenir de las economías y los mercados. Estaba a punto de vencerle un depósito y no sabía muy bien qué hacer con ese dinero. Por un lado, apenas le ofrecían intereses en la renovación del plazo fijo; por otro, no estaba dispuesto a asumir riesgos mayores.
Así que acudió a buscar entre los fondos de inversión la opción menos arriesgada. Y se acabó decantando por un monetario o un fondo de renta fija a corto plazo, que suelen estar considerados por los reguladores como los productos con un menor riesgo según la CNMV (1, en una escala del 1 al 7). La pregunta es¿ ¿Qué ha pasado con esta inversión tres años después?
Pues es muy probable que esté en negativo, sin grandes sangrías, eso sí, pero en negativo al fin y al cabo. Sobre todo si optó por un fondo monetario, ya que la media de los fondos de este tipo de gestoras españolas ya está en pérdidas a tres años, de acuerdo con los datos de Inverco, la asociación del gestor.
Con datos a cierre de junio, las caídas en promedio de los monetarios españoles se sitúan en un -0,13% anualizado a este plazo, con casi el 70% de los 35 fondos de este tipo en negativo. La realidad todavía es más cruda a un año, plazo en el que ceden de media un -0,3%, con más del 90% en rojo.
Entre ellos, los dos más grandes de la categoría, el CB Monetario Rendimiento Cartera, con una caída del -0,06% a un año, y el CB Monetario Rendimiento Estándar, que cede un -0,07% a 12 meses y un -0,11% anualizado a tres años, de acuerdo con los datos de Inverco. A pesar de los pesares, entre ambos todavía suman más de 220.000 clientes.
La situación mejora algo, pero tampoco como para descorchar el champán, si nos fijamos en la otra categoría teóricamente más conservadora, los fondos de renta fija a corto plazo. De media se mantienen en positivo por los pelos a 1 y 3 años, pero muchos de estos productos lucen ya signo negativo a estos plazos.
Por ejemplo, el Kutxabank RF Carteras, que cede un 0,3% y un 0,1%, respectivamente, y que cuenta con casi 53.000 partícipes, o el Eurovalor Ahorro Euro, con 43.000 clientes a cierre de junio y pérdidas muy similares al del fondo anterior en los respectivos plazos.
Las pérdidas de estos fondos se producen por dos factores. Primero, porque el activo no da para más. Las emisiones de tipos de interés consideradas `más seguras¿ cotizan todavía con rendimientos en mínimos históricos. Esto nos viene muy bien si tenemos una hipoteca, porque hace que el euribor esté en negativo, pero no tanto si invertimos en este tipo de productos.
Segundo, por las comisiones. Si el activo no da para más y además invertimos en productos con altas comisiones de gestión dentro de su categoría, será muy probable que acabemos sufriendo pérdidas en nuestra inversión, aunque no sean muy abultadas. Y en muchos casos estos productos tienen comisiones cerca de los máximos permitidos.
Por eso, es fundamental saber el coste que nos puede acabar suponiendo nuestro fondo en comparación con la rentabilidad que podemos obtener del mismo. Un cálculo que puedes realizar tu mismo con la píldora interactiva que puedes encontrar a continuación:
Coste de un fondo.: