En un comunicado, Aecosan ha explicado que los sistemas de control permiten la localización y la retirada de los productos implicados y que se mantiene en contacto con las autoridades competentes de las comunidades autónomas.
De hecho, fue el Sistema Europeo de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos quien advirtió en julio de la presencia de fipronil -un producto no autorizado para su uso en animales- en huevos en Bélgica, desde donde se distribuyeron a varios países como Austria, el Reino Unido, Irlanda, Italia o Eslovaquia.
Ayer por la tarde, este mismo sistema europeo de alerta advirtió a las autoridades españolas de la distribución de una partida de huevo líquido pasteurizado destinada a un establecimiento ubicado en el País Vasco y procedente de Francia.
La agencia se puso en contacto con las autoridades competentes de la comunidad autónoma y los servicios de inspección actuaron "de forma inmediata" inmovilizando en destino esta partida, de 20.000 unidades de huevo, antes de que entrara en ningún proceso de fabricación de producto.