Según el último Global Dividend Index elaborado de forma trimestral por Janus Henderson, los dividendos globales alcanzaron en el segundo trimestre del año la cifra record de 447.500 millones de dólares en el segundo trimestre, lo que refleja una tasa de crecimiento subyacente del 7,2% interanual, la tasa de crecimiento más elevada desde el año 2015.
De esa cifra total, las compañías europeas suponen un 40% (149.500 millones de dólares, unos 127.151 millones de euros al cambio actual) gracias, sobre todo, al elevado componente estacional del reparto de estas empresas, ya que, en términos de valor, un 66% de los dividendos se distribuye entre abril y junio.
Los expertos de Janus Henderson, que en su análisis tienen en cuenta la evolución del euro frente al resto de divisas, explican que ¿el 86% de las empresas europeas presentes en el índice incrementaron o mantuvieron su remuneración al accionista en tasa interanual¿. Las principales subidas provinieron de los países de menor tamaño. Austria, Portugal, Bélgica y Finlandia se anotaron las tasas de crecimiento subyacente más aceleradas.
En Austria, por ejemplo, el principal impulsor fue la financiera Erste Bank, que duplicó su dividendo, y la petrolera OMV, que incrementó el suyo un 20%. La contraparte portuguesa de OMV, Galp Energia, también hizo lo propio.
Dentro del ranking europeo, los repartos españoles decepcionaron al caer un 10% interanual hasta 6.100 millones de dólares (unos 5.168 millones de euros, al cambio actual), lo que equivale a un descenso subyacente del 6,3%. En Italia, por ejemplo, el descenso fue del 19,1% hasta 8.300 millones de dólares, y se debió principalmente a la decisión de Enel de realizar repartos semestrales y a la cancelación del dividendo de Unicredit. Sin embargo, en base subyacente, el total de Italia solo se redujo un 0,8%
¿Qué pasó en el resto de Europa?
Los repartos suizos alcanzaron un récord de 24.800 millones de dólares, lo que refleja un incremento interanual del 8,4%, con un alza similar en términos subyacentes (8,6%). La mayor subida estuvo protagonizada por Lafarge Holcim, que incrementó su dividendo por acción en un 33%.
Los repartos totales en Alemania también aumentaron un 8% hasta 34.100 millones de dólares, lo que apunta a un crecimiento subyacente del 7,5%, aunque no lograron batir las cifras récord de 2014. Deutsche Bank y Volkswagen restablecieron parcialmente sus dividendos, mientras que Commerzbank canceló sus repartos al encontrarse inmerso en un complejo y costoso proceso de reestructuración. No obstante, esta entidad fue la excepción: casi un 90% de las empresas alemanas incrementó o mantuvo su remuneración al accionista.
Los dividendos franceses cayeron un 1% en tasa general hasta los 40.600 millones de dólares, aunque en tasa subyacente crecieron un 6,1%. Esta diferencia se debe principalmente a que el gigante petrolero Total modificó el calendario de reparto de su dividendo a principios de 2016, y el año pasado realizó dos distribuciones en el segundo trimestre mientras que este año solo ha llevado a cabo una. Vivendi también distribuyó 1.000 millones de dólares menos que el año pasado al estar inmersa en un proceso de reestructuración. Sin embargo, Peugeot distribuyó su primer dividendo en seis años ante la marcada subida de sus beneficios gracias a una mejor combinación de ventas, unos precios más elevados y los ahorros de costes. En términos generales, un 75% de las empresas francesas mantuvieron o incrementaron su remuneración al accionista.