Los índices europeos aguantan números verdes anuales en la recta final del tercer trimestre. Un avance en el que las cotizadas de mediana capitalización han quedado rezagadas con respecto a las gigantes del parqué y las cotizadas de tamaño más modesto.
A estas alturas del año, el Ibex Small Cap es el índice de referencia de la Bolsa española que mejor comportamiento arroja con una remontada superior al 16%. Un ascenso que los analistas atribuyen a dos factores: menor afectación por la agitación geopolítica internacional y menor exposición a la volatilidad del tipo de cambio del euro a consecuencia de la indefinición que se ha apoderado de los principales bancos centrales del mundo.
En el otro extremo por capitalización, el Ibex 35 ha logrado sumar cerca de un 10% en el año gracias a las mejores perspectivas macroeconómicas globales. Un factor que se repite en los grandes índices europeos y que en el caso del español ha venido alimentado también por el mayor peso relativo del sector financiero, que se ha beneficiado de los pronósticos de retirada progresiva de estímulos por parte del Banco Central Europeo, favoreciendo a la postre los márgenes de su negocio tradicional.
Muy a la zaga, con ganancias del entorno del 4% se queda a estas alturas de septiembre el Ibex Medium Cap. La ausencia de valores financieros sólidos en su composición, la exposición a un adverso efecto divisa de muchos de sus componentes y el trasvase de capitales hacia activos considerados de riesgo relativo y refugio ha condenado a estos valores a un cierto olvido en las carteras.
Un reciente informe de análisis firmado por Andbank sugiere que la opción de sobreponderar las más pequeñas compañías frente a las de capitalización más voluminosa va camino de confirmarse como una estrategia tan positiva como lo ha sido en ¿la última década tanto en Europa como en EEUU¿. En este sentido, subrayan que además de estar ¿menos expuestas a las fluctuaciones actuales del euro - dólar¿, también ¿se benefician de forma más directa de la recuperación de la actividad doméstica¿.
Este cuadro se torna aún más evidente si se toman como punto de partida los cierres de los tres índices más representativos de la Bolsa española en el año 2015. El ejercicio pasado el Small Cap ya fue el más puntero de su familia de tres y en el acumulado desde entonces suma un 28,6% arriba, mientras que el Ibex 35 apenas aglutina avances del 6,2% y el Medium Cap sufre la pérdida de un 2% de su capitalización conjunta.
Evolución familia índices Ibex. Fuente: Google Finance
LAS ENERGÉTICAS SE LLEVAN LA PEOR PARTE
Para reforzar el peso de los datos acumulados, los analistas de Andbank lanzan una dura advertencia en torno al futuro más inmediato del Ibex 35 y sus comparables europeos. ¿Durante el verano, los analistas se han dedicado a ajustar los crecimientos esperados para el año en su conjunto¿ a tenor de que en sus últimos balances publicados ¿las compañías no han podido cumplir con las (exigentes) expectativas del consenso¿, señala el informe.
A pesar de que la economía del Viejo Continente ¿sigue mostrando cierta fortaleza¿ a pesar de la drástica apreciación del euro, se espera que las ¿decepciones¿ de los beneficios por acción de las grandes cotizadas se repitan o agudicen en próximas presentaciones de cuentas. Un entorno en el que desde el banco de inversión andorrano avisan de que ¿el gran perjudicado por este optimismo previo a los resultados ha sido el sector energético¿, que precisamente ha sido ¿el mayor contribuidor al crecimiento de beneficio del índice¿ y un tirón alcista que en las últimas semanas flaquea con más temblor que en los últimos meses.