El avance se apoyaba en la recuperación del sector bancario, que en la víspera sufrió recortes bursátiles, en especial las entidades catalanas, ante el recrudecimiento del choque institucional entre el Gobierno español y el catalán por el plan de referéndum soberanista en Cataluña para el 1 de octubre.

La cautela por la situación en Cataluña limitaba el repunte del mercado español por la prudencia de los inversores extranjeros a medida que se acerca la fecha de una consulta declarada ilegal por la justicia.

El Ibex-35 subía un 0,2 por ciento 10.312,4 puntos, por debajo del 0,36 por ciento que avanzaba el europeo FTSEurofirst 300. El jueves el Ibex cayó casi un 1 por ciento mientras el índice europeo cedió solo un 0,14 por ciento.

El avance se sustentaba en parte en la pérdida de valor del euro, que favorece las exportaciones de las empresas de la eurozona, después de que la Reserva Federal estadounidense anunciara que tiene previsto comenzar a deshacerse de los activos adquiridos para estimular la banca y apuntara a una nueva subida de tipos de interés en diciembre.

Caixabank y Sabadell, entre los más penalizados el miércoles, subían más de un 1 por ciento el jueves, y también mostraban repuntes similares otros grupos bancarios como Santander, BBVA y Bankia .

Inditex, que el miércoles arrastró al Ibex tras no alcanzar las previsiones de los analistas en sus cuentas del primer semestre, volvía a ceder terreno, con un recorte del 0,5 por ciento.

Los sectores de acero y electricidad, animados el día anterior por noticias de fusiones, registraban algunos de los mayores descensos el jueves, con caídas superiores al 1 por ciento en Endesa, Iberdrola, Acerinox y Gas Natural, entre otras.