Los operadores del parqué neoyorquino apostaron por las compras toda la jornada, y llegaron a coquetear con máximos históricos del S&P 500 y el Nasdaq en la recta final, mientras el presidente Trump presentaba los detalles de su plan de reforma fiscal. La propuesta incluye una rebaja de la tasa impositiva de las empresas del 35 % al 20 %, la supresión del impuesto de sucesiones y la reducción de siete a tres de las categorías de impuestos a la renta (12 %, 25 % y 35 %). Por otro lado, antes de la apertura el Departamento de Comercio publicó que los pedidos de bienes duraderos a las fábricas del país crecieron un 1,7 % en agosto, tras haber experimentado en julio un fuerte caída del 6,8 %. Al final casi todos sectores en Wall Street cerraron al alza, como el tecnológico (1,06 %), el financiero (0,76 %), el de materias primas (0,36 %), el industrial (0,35 %) o el energético (0,11 %), y solo bajó el de empresas de servicios públicos (-1,01 %). United Technologies (2,14 %) lideró las ganancias en el Dow Jones, por delante de Goldman Sachs (2,10 %), JPMorgan (1,58 %), UnitedHealth (0,93 %), Visa (0,92 %), American Express (0,90 %), Microsoft (0,81 %), Apple (0,71 %) o Exxon Mobil (0,67 %). Al otro lado de la tabla encabezó las pérdidas General Electric (-2,25 %), por delante de Coca-Cola (-2,0 4%), Procter & Gamble (-1,92 %) o Nike (-1,92 %), que decepcionó a los inversores con los resultados trimestrales que presentó la firma deportiva. Al cierre de la sesión bursátil, el petróleo de Texas subía a 52,06 dólares, el oro retrocedía a 1.285,6 dólares, la rentabilidad de la deuda pública a diez años avanzaba al 2,298 % y el dólar ganaba terreno al euro, que se cambiaba a 1,1753 dólares.