Este contrato, valorado en 252.043 euros, llega después de que en agosto saliera adelante el convenio en virtud del cual Seittsa gestionará dichas vías y las preparará para volver a licitarlas, probablemente en un único paquete y a finales de 2018.
Se trata de las radiales madrileñas R-2, R-3, R,4 y R-5, la M-12 (Eje Aeropuerto), la AP-36 (Ocaña-La Roda), AP-41 (Madrid-Toledo), AP-7 (Cartagena-Vera) y la Circunvalación de Alicante, que pasarán a ser explotadas por Seittsa entre enero y abril del próximo año.
Según la cuenta de pérdidas y ganancias incluida en un anexo al citado convenio, el Gobierno prevé que dichas vías generen un beneficio neto de 34,3 millones de euros, con unos ingresos por pajes de 93,4 millones.
La idea es que la reversión al Estado y la nueva adjudicación se produzcan en el mismo año para que su impacto en el déficit sea mínimo, ya que, al realizarse dentro del mismo ejercicio, el ingreso procedente de la licitación restaría en el déficit.
Con los ingresos que se obtengan, el Gobierno prevé minorar el impacto que tendrá el pago de la responsabilidad patrimonial administrativa (RPA) al que tendrá que hacer frente el Estado y que el sector cifra en más de 4.000 millones de euros.