El sorteo se celebrará a final de cada mes y en él participarán todos los pagos mediante tarjeta de consumidores mayores de edad que dispongan de un código de identificación fiscal, informó el ministerio de Finanzas en un comunicado.
La lotería distribuirá cada mes 1.000 premios de 1.000 euros cada uno, que serán transferidos a las cuentas bancarias de los ganadores.
Según el comunicado, los premios no estarán sujetos al impuesto sobre la renta, ni tampoco pueden ser confiscados por deudas del ganador con Hacienda o con la Seguridad Social.
Grecia era uno de los países europeos con menor uso de tarjetas bancarias hasta la imposición del control de capitales en julio de 2015.
Según datos de Mastercard de junio pasado, a partir de entonces su uso subió exponencialmente, y los pagos por tarjeta pasaron del 6 % del consumo total en 2014 al 13 % en 2016, aunque sigue estando claramente por debajo de la media europea (40 %).
Este incremento tuvo un efecto inmediato en las arcas del Estado, cuyos ingresos por IVA aumentaron en más de un 10 % en 2016, según el Banco de Grecia.
Sin embargo, esta medida no fue suficiente, pues muchos comerciantes ofrecen a su clientela rebajas si pagan en efectivo.
Según cálculos del Ministerio de Finanzas, la economía sumergida mueve cifras que suman en torno al 25 % del PIB.
A finales de agosto, la deuda total con Hacienda ascendía a 98.230 millones de euros, fruto en parte de la crónica evasión fiscal pero también de la imposibilidad de muchos contribuyentes para hacer frente a sus obligaciones fiscales como consecuencia de la crisis. EFECOM
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