Así lo ha indicado el director del departamento de mercados monetarios y de capital del organismo internacional, Tobias Adrian, en una entrevista al diario 'Financial Times', donde explica que existe un creciente apetito por la rentabilidad que está impulsando a los inversores a buscar nuevas formas de aumentar sus ingresos a través de instrumentos de alta complejidad.
"La combinación de bajas rentabilidades y bajos niveles de volatilidad empuja a los inversores al uso del apalancamiento para aumentar los retornos de capital", señaló.
Según diferentes índices que miden la volatilidad en el mercado, muestran que se encuentra en su nivel más bajo desde hace una década.
Esta situación, si se mantiene de manera sostenida, incentiva a que los inversores asuman niveles más elevados de apalancamiento a través de modelos de riesgo que usan la volatilidad como impulso a los rendimientos, a la vez que entran en juego participantes que subestiman los peligros al no ver los riesgos reales.