Ángel Gómez

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que había elegido a Powell para reemplazar a Janet Yellen en la Presidencia de la Fed cuando se termine su mandato, en febrero próximo.

El anuncio fue hecho una hora antes de que terminara la sesión bursátil de este jueves, que se ha mantenido con un comportamiento irregular durante la primera mitad, hasta que la noticia dada por Trump imprimió rumbo en el último tramo de la jornada.

El Dow Jones de Industriales, el principal indicador del mercado, acabó con un nuevo récord, renovando el que arrastraba desde el 24 de octubre, al terminar con un avance del 0,35 % y alcanzar los 23.516,26 puntos.

El selectivo S&P 500, que estaba en negativo antes de que apareciera Trump junto a Powell en los jardines de la Casa Blanca, cambió la dirección después de ese anuncio, y terminó con un avance del 0,02 %, a menos de dos puntos de su récord del viernes pasado.

El índice del Nasdaq también se movió hacia a arriba, pero con un repunte que no fue suficiente para terminar la sesión en positivo, a la espera de los resultados trimestrales de Apple, que se esperaban al cierre de las operaciones.

Ya desde hace varios días Powell se había convertido en la figura que más puntos había acumulado para ser elegido por Trump, por lo que la designación no arrojó demasiadas sorpresas para Wall Street, aparte de confirmar lo que ya se anticipaba.

Powell es miembro de la junta de gobernadores de la Fed. Las últimas cuatro décadas ha desempeñado sus labores en el Gobierno, en bufetes de abogados y en las finanzas privadas.

Será el primer presidente de la Fed desde fines de los años setenta que no tiene un grado universitario en Economía.

Está considerado como un continuador de las actuales políticas monetarias que ha mantenido Yellen, aunque se cree que puede llegar a impulsar una relajación de las regulaciones financieras actuales.

De cualquier forma, la jornada ha estado revuelta desde un comienzo, más que nada por las informaciones que han ido surgiendo sobre el proyecto de reforma fiscal que debe analizar el Capitolio, el programa que más de cerca sigue Wall Street.