Así lo ha señalado durante la inauguración del XXII Congreso Internacional del Centro Latinoamericano de Administración para el Desarrollo (CLAD), en el que ha afirmado que España cerrará el ejercicio 2017 con un déficit público del 3%, de forma que se conseguirá acabar el año con "miles de administraciones públicas saneadas", la "gran mayoría" de los 8.000 ayuntamientos, e incluso con superávits.
"Este año vamos a cerrar en un déficit del 3% en las administraciones públicas", ha asegurado Montoro, lo que, de confirmarse, supondría una décima menos que el objetivo previsto por el Gobierno en el plan presupuestario remitido a Bruselas a mediados de octubre y situaría a España más cerca de salir del brazo correctivo del procedimiento de déficit excesivo en el que lleva inmersa desde 2009.
En este sentido, el ministro ha recordado que en el año 2011 España presentaba un déficit del 9,3% y la deuda comercial alcanzaba los 35.000 millones de euros y ha dicho que habría sido un "error" haber seguido las recomendaciones de años atrás de "cerrar miles de ayuntamientos", porque esas administraciones "asientan al ciudadano en el territorio" y garantiza los servicios públicos.
De igual forma, se ha referido al cierre de más de 2.000 empresas públicas y a la nueva Ley de Contratos del Sector Público, que "enfatiza en la transparencia en la contratación pública y la eficiencia en el uso de recursos públicos".
CRECIMIENTO SUPERIOR AL 3% Y 600.000 NUEVOS EMPLEOS
Asimismo, Montoro ha destacado que "España está creciendo" y se sitúa a la cabeza en términos de crecimiento entre los países de la OCDE, y ha subrayado que este año la economía volverá a crecer por encima del 3% por tercer año consecutivo, acompañado de una reducción del paro y la creación "del orden de 600.000 empleos nuevos".
Las últimas previsiones del Gobierno recogidas en el plan presupuestario eran de un crecimiento del empleo equivalente a tiempo completo del 2,9% este año, con una creación de más de 500.000 empleos y un descenso de la tasa de paro al 17,2% a final del ejercicio.
El titular de Hacienda ha indicado que el "empeño" del Gobierno es combinar la hacienda pública con la administraciones, ya que aunque "no es fácil" es "saludable" y "oportuno" cuando se atraviesa una crisis, ya que es hacer operativo el objetivo de una administración pública "moderna".
A su juicio, una Administración moderna debe ser "financiada, equilibrada y saneada", y tener la capacidad de financiarse "correctamente" sobre la capacidad de recaudación, lo que debe ser "compatible" con el bienestar de los ciudadanos, el crecimiento, la inversión, la creación de empleo y la competitividad.