"Aunque estas monedas digitales pueden no suponer grandes preocupaciones a los niveles actuales de uso, pueden originarse problemas de estabilidad financiera más graves si alcanzan un uso a gran escala", dijo Quarles en su intervención en una conferencia en el Departamento del Tesoro en Washington.
Las palabras del supervisor de la Fed se producen en un momento de inquietud acerca del posible estallido de la burbuja del bitcóin, cuyo precio se ha multiplicado por diez en menos de un año y ha alcanzado esta semana los 11.000 dólares.
En este sentido, afirmó que "sin el apoyo de un activo de un banco central o respaldo institucional no está claro cómo se comportaría una divisa digital privada en el centro de un sistema de pagos de gran escala, o si sería capaz de funcionar, en momentos de tensión".
Quarles ha asumido recientemente el cargo de supervisión de regulación financiera en la Fed, tras ser nombrado por el presidente estadounidense, Donald Trump, y haber sido ratificado por el Senado.
El éxito en los últimos años del bitcóin, que comenzó a distribuirse en la red en 2009, ha llevado a la creación de otras divisas virtuales, como Ethereum, cuya cotización ha pasado de unos 10 dólares en enero a cerca de 480 dólares en la actualidad.
Pese a las numerosas advertencias sobre una posible caída repentina del valor del bitcóin, algunas voces sostienen que la cotización todavía tiene recorrido al alza.