La CNMV eliminará rigideces y acortará plazos para hacer atractivo el mercado de renta fija
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) llevará a cabo una serie de cambios para "agilizar" los procedimientos de verificación de emisiones de renta fija de las empresas, con el objetivo de que el mercado español resulte "atractivo" en este sentido y se asimile al del resto de Europa.
1 diciembre, 2017 11:30Fuentes de la CNMV han explicado hoy que, para ello, comenzarán a aplicar un menor grado de revisión sustantiva en estos procesos, evitando "especificidades innecesarias", para facilitar que las empresas españolas y de la Unión Europea (UE) consideren emitir bonos de renta fija a inversores cualificados en territorio nacional.
En concreto, en cuanto a plazos, el supervisor rebajará a tres días la remisión de comentarios a las condiciones finales de estas emisiones, y a dos días hábiles en el caso de comentarios posteriores.
Asimismo, realizará la verificación de requisitos de admisión en el plazo de dos días hábiles, en lugar de hasta diez como se permitía actualmente, desde que se haya recibido la documentación, y no revisará con anterioridad a la colocación las condiciones finales de emisiones.
Además, dejará de exigir la entrega de información estadística sobre quiénes han sido los suscriptores de los bonos y obligaciones emitidos, que hasta ahora se pedía en España pero no en el resto de la UE, y adoptará cambios "relevantes" en los procedimientos como verificar operaciones cualquier día laborable para mejorar los plazos de revisión y aprobación.
De esta forma, la CNMV espera que este enfoque "converja" con el del resto de países europeos y que el mercado español resulte "atractivo", al dar respuesta a las demandas de los emisores sobre la agilidad necesaria para la admisión a cotización de los valores.
Estos cambios se producen tras observar en los últimos años la intensidad de emisiones de renta fija de empresas nacionales en mercados extranjeros, ya que el 70 % de deuda corporativa (no financiera) emitida por compañías españolas el año pasado se hizo en el exterior.
Desde el supervisor, en este caso, no consideran que esta situación se deba a la regulación española o a la fiscalidad aplicada, según han extraído de sus conversaciones con emisores, bancos colocadores y asesores legales.