La emisión se integra en el mandato otorgado por la Comisión de Gobierno del Ayuntamiento de la Ciudad Condal a Crédit Agricole para asesorar, estructurar y colocar una o varias emisiones de deuda por un importe máximo global de 86,1 millones de euros.

La emisión, que cuenta con un vencimiento a diez años y un cupón anual del 1,921%, se enmarca en el plan de acción municipal 2016-2019, que fija los objetivos de la ciudad para generar desarrollo social y económico sostenible.

Para calificar un proyecto como sostenible su fin debe perseguir objetivos de mejora en el acceso de la población a servicios esenciales, desarrollo y progreso socioeconómico, vivienda asequible, generación de empleo, eficiencia energética y transporte limpio, prevención y control de la contaminación o de desarrollo de infraestructuras para una gestión sostenible del agua.

Crédit Agricole CIB ha actuado como entidad estructuradora y único colocador, mientras que la entidad agente y el agente de pagos de los bonos es Caixabank.

El Ayuntamiento de Barcelona cuenta con un rating BBB+, perspectiva positiva, por parte de la agencia de calificación Standard & Poors (S&P Global); BBB+, perspectiva positiva, por Fitch y Baa2, estable, por parte de Moody's, todas ellas en grado de inversión.